[resumen.cl] La empresa, propiedad del Grupo Solari, arrastra desde marzo un proceso de negociación en el cual no ha optado por las exigencias de las y los trabajadores. Así, el Sindicato N°1 Promotora CMR, de carácter nacional, aprobó en un 83,3% de sus socias/os el inicio de huelga para este jueves.

Como «inflexibles» han categorizado trabajadores y trabajadoras al gigante CMR Falabella, propiedad de la conocida familia Solari, tras un proceso de negociación colectiva que se ha visto entrampado durante meses.

El conflicto laboral se ha generado, principalmente, por la intransigencia de la empresa en dar cabida a las exigencias de las y los trabajadores que, en plena mediación obligatoria, se encuentran ad portas de iniciar una huelga de carácter nacional.

En conversación con RESUMEN, Andrea Marchant, presidenta del Sindicato Nº1 Promotora CMR, dio a conocer que desde marzo la negociación colectiva se encuentra en desarrollo, proceso extendido por múltiples razones entre las que se encuentra la suspensión del proceso de votación a huelga por parte de la Inspección del Trabajo a partir de las restricciones sanitarias producto de la pandemia de la Covid-19.

Sin embargo, luego de ser levantada la suspensión se estableció una mediación obligatoria donde, en su primer acercamiento, señalan en un comunicado, «no vimos ninguna intención de la empresa en mejorar los beneficios«.

Ante este escenario el Sindicato, que cuenta con la afiliación de 1.200 trabajadores y trabajadoras a nivel nacional, realizó la votación de huelga, siendo aprobada por un 83,3% del quórum (más de 900 personas).

Marchant señala que, hasta la fecha, «no hemos tenido ninguna postura viable de llegar a algún acuerdo«, enfatizando en la nula voluntad de parte de la empresa en establecer una negociación.

A modo de contexto, la dirigenta sindical indica que «la empresa CMR se unió a Banco Falabella, o sea ahora son uno, y básicamente  nosotros estamos pidiendo igualdad en seis puntos. Más que nada, de los beneficios que tiene la gente de Banco, porque la gente nuestra -de CMR- está haciendo las mismas funciones que los ejecutivos de banco y mayor trabajo aún«.

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El argumento de la empresa, enfatiza Marchant, se sustenta en los efectos de la crisis sanitaria y cómo esta a permeado sus ganancias, cuestión que, a reflexión del Sindicato, no tiene asidero considerando los millonarios ingresos del Grupo Falabella durante la pandemia como también el nulo gasto invertido por parte de la empresa en el teletrabajo que han debido adoptar cientos de trabajadores/as.

Concretamente, entre las exigencias de las y los trabajadores se encuentran un reajuste del sueldo base a un 4%, tres bonos (colación/movilización, vacaciones y escolaridad), aguinaldo y una amplia gama de demandas que tienen relación con los bajos beneficios que tiene CMR tras su integración a Banco Falabella.

A modo de cierre, la dirigenta sindical comenta la importancia de dar difusión a la problemática. En esta línea, plantea como central que «las personas y los mismos clientes se den cuenta como es la patronal Falabella«, mismo Grupo que ha sido premiado como empresa de retail más responsable, pero que «no valoran el esfuerzo» de las y los trabajadores.