Producto del fin del periodo escolar, los efectos de la pandemia y la nula intención por parte de la administración del Colegio Parque Central de ceder en las exigencias, las y los trabajadores mantendrán la huelga tras más de un año de negociación.
Por Cristian Márquez
Luego de no haber podido llegar a un acuerdo con la administración del colegio en varias oportunidades, el Sindicato Único de Trabajadores y Trabajadoras del Colegio Parque Central de Hualpén se mantendrá en huelga hasta que se retomen las actividades académicas y se inicie el año escolar, lo cual todavía no está definido. El sindicato se mantiene en huelga desde el 14 de diciembre del año pasado, esto luego de que hace más de un año hayan iniciado el proceso de negociación colectiva, con el fin de mejorar sus condiciones laborales -con peticiones mínimas según lo establecido por ley- y, de paso, transparentar los balances económicos del colegio.
Después de varias tratativas llevadas adelante por parte del sindicato para concretar reuniones con la familia Rivera Seitz -que incluyeron incluso la mediación de dirigentes del Colegio de Profesores-, finalmente pudieron agendar una reunión a través de la mediación voluntaria que lleva a cabo la Inspección del Trabajo. Así lo relata Rachel Fierro, presidenta del sindicato: "Para poder avanzar en la negociación, le mandamos la contrapropuesta con dos días de anticipación a la reunión, bajamos el valor de bonos, renunciamos a otros y solicitamos, eso sí, que se reconsiderara el bono a la trayectoria docente. Pero el mismo día de la reunión, una hora antes nos mandaron su respuesta que fue catastrófica. No tenía sentido entrar a una reunión así. A todas nuestras propuestas nos respondió que no, que no había plata".
Desde el sindicato destacan lo difícil que ha sido acercar las posturas, esto principalmente debido a que la sostenedora del Colegio Parque Central, Evelyn Rivera Seitz, no ha querido conceder ninguna petición, pues señala, declaran desde el sindicato, que no hay dinero y que su familia es mera administradora de los recursos que les llegan, algo que Rachel Fierro descarta tajantemente, ya que señala que como organización han tenido acceso a los balances del establecimiento educacional: "Vimos el balance que nos entregó la Superintendencia, de cómo rinden los dineros, el contador auditor de nuestro sindicato nos dijo que en estos dos años, en donde se puso fin al lucro, ellos están rindiendo una cuenta de aproximadamente entre el 67% y 70% solo en remuneraciones de toda la plata que llega, el resto se va en el arriendo y lo que sobra en educación. También hay 60 millones declarados en talleres extraprogramáticos y/o capacitaciones, pero nosotros no hemos tenido ninguna capacitación significativa".
Con respecto a esta última reunión entre ambas partes, Fierro comentó a RESUMEN que fue una ardua discusión en la que no llegaron a ningún acuerdo e incluso se distanciaron más las respectivas posturas: "Estuvimos tres horas en una reunión espantosa, no tenían argumentos para defenderse. Uno de los dueños del Colegio, Arturo Rivera, dijo que no tenían plata, que eran meros administradores. Pero yo lo enfrenté, le pregunté ¿Por qué entonces ustedes declaran en sus balances anuales que gastan más de 20 millones en colación y movilización? ¿Quién se lleva esa plata? Y lo único que dijo el caballero es que debía ser un error".
"Gracias al sindicato hemos descubierto no solamente que se metieron en nuestro bolsillo, sino que además han lucrado de manera escandalosa en el colegio. El fin de la familia Rivera Seitz al fundar este colegio nunca fue la educación, el interés de ellos solo fue lucrar, tenemos certeza de eso. Ellos creen que el colegio es una empresa, creen que somos sus esclavos, la gente de Parque Central está súper agradecida del sindicato porque el colegio tiene muchas irregularidades y ahí se nota que la preocupación de ellos no es la educación", indicó Fierro a RESUMEN.
Además de los amedrentamientos, prácticas antisindicales y una serie de acciones llevadas a cabo por la familia sostenedora para debilitar al sindicato y, por consiguiente, a los trabajadores y trabajadoras movilizadas, -todo detallado anteriormente a RESUMEN– hubo un episodio que provocó la molestia del sindicato, pues consideran que la familia Rivera Seitz jugó con su tiempo, en momentos previos a las fiestas de fin de año: "No encontraron nada mejor que hacernos un juego, no sé cómo explicarlo. Nos hicieron llegar una última propuesta, un día después de la reunión, que era exactamente igual a la anterior, un no a todo, cero dinero para todo. Ella (Evelyn Rivera) ingresó esta propuesta a la Inspección del Trabajo, cosa que no hizo la vez anterior, y por eso nos vimos obligadas a votar su última propuesta. Entonces nos citaron a votar el miércoles 30 de diciembre a las cinco de la tarde. Yo tenía colegas que iban a viajar a ver a sus familiares, a pasar el año nuevo, entonces teníamos que votar porque sino se iba a aprobar la última propuesta de la sostenedora. Fue una locura", afirmó la dirigenta.
Te puede interesar| Iniciaron huelga: Sindicato Único de Trabajadores y Trabajadoras del Colegio Parque Central de Hualpén denuncia malos tratos y prácticas antisindicales por parte de sostenedora
Desde la organización sindical acusaron la mala intención de la familia sostenedora, que teniendo varios días para presentar una propuesta esperó hasta el último día y en la previa del recibimiento de año nuevo: "Tuvimos que votar a última hora cuando ella tuvo 17 días para presentar una propuesta de negociación y no entregó nada. Además habíamos tenido la mediación el día anterior y no llegamos a ningún acuerdo, entonces no sé cuál fue la maniobra de la sostenedora, quizás pensó que no íbamos a ir a votar o lo hizo para molestarnos entre el 30 y 31 de diciembre porque no había forma de que votáramos a favor de su propuesta. Pero finalmente entre los 18 sindicalizados nos organizamos a última hora y lo logramos, rechazamos su propuesta y votamos huelga, así que volveremos a huelga en marzo", concluyó Rachel Fierro, Presidenta del Sindicato de Trabajadores y Trabajadoras.
Asimismo, desde el sindicato también destacaron el hecho de que hay algunos profesionales del colegio que igualmente recibirán los eventuales beneficios que se obtengan, aún cuando han ido renunciando a la organización en el transcurso de las negociaciones, que ya llevan más de un año, producto de la pandemia, el término del año académico y la intransigencia de los sostenedores: "Nosotros fuimos 25 trabajadores que presentamos el contrato de negociación colectiva en diciembre de 2019, pero en el camino han ido renunciando algunos asistentes de la educación y docentes a nuestro sindicato, sin embargo, siguen siendo parte del contrato inicial entonces todo lo que estamos luchando va a ir en beneficio de ellos también".
En ese sentido, la presidenta del sindicato indicó que existieron irregularidades con respecto a las colegas que presentaron licencia: «Incluso el mismo día de la votación en la Inspección del Trabajo, nos enteramos que dos colegas presentaron licencia médica desde el 14 al 31 de diciembre. Pero si estamos en huelga (ellas también), se entiende por suspendida la relación laboral, por lo que es muy raro poder presentar una licencia médica. Y lo otro es que si se hacen efectivas estas licencias médicas, ellas recibirán su pago completo del mes de diciembre. En cambio nosotras, que nos hemos asoleado, que aún estamos dando la lucha por mejorar nuestras condiciones laborales no recibimos el sueldo completo y nos desconectaron los 17 días de huelga».
Otras de las iniciativas que están impulsando como sindicato es la creación de un Centro General de Padres y Apoderados, que actualmente no existe en el Colegio Parque Central y que es necesario para el correcto y transparente funcionamiento del establecimiento.
Así es como luego que el año académico se diera por concluido, las negociaciones quedaron suspendidas y postergadas hasta que se retomen las clases y se dé inicio al periodo escolar del presente año.