Por Joaquín Hernández
A medida que internacionalmente se va sabiendo de la forma de afrontar del gobierno de Sebastían Piñera a las protestas a lo largo de todo el país, es que crecientemente han surgido voces que llaman a tomar acciones en solidaridad y apoyo al pueblo chileno, desde protestas en las afueras de las embajadas y consulados chilenos en distintas partes del mundo, hasta el llamamiento de un diputado francés Alexis Corbiere, de que su país no participe de la COP25 a realizarse en Chile, si la situación del país no mejoraba.
Del mismo modo, es que los trabajadores portuarios agrupados internacionalmente en la International Dockworkers Council (IDC), con 120 mil trabajadores y 93 sindicatos alrededor del globo, instaron a reaccionar al gobierno chileno exigiendo tanto el fin a la escalada represiva que tiene en estado de emergencia y con toques de queda a gran parte del país, como también instando a acceder por parte del gobierno y el poder político a demandas "totalmente legítimas, especialmente aquellas de reivindicación social, previsión, jubilaciones, salud, educación, servicios básicos como electricidad, agua, y un largo etcétera".
Señalan, en un comunicado reproducido por la Unión Portuaria del Biobío, que de no atender a las demandas antes señaladas, y de no acabar con el toque de queda y la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles del país, se verán en la obligación de bloquear las cargas provenientes de Chile en los puertos en donde tienen trabajadores adheridos a la IDC.
De este modo, se da un ejemplo internacional de ayuda por parte de trabajadores de todo el mundo al pueblo chileno, y una importante medida de presión al gobierno chileno para que tome acciones concretas y acabe con el Estado de Emergencia a lo largo del país.