[resumen.cl] La brutalidad del Estado colombiano hacia su población se vive ahora en las principales ciudades debido al Estallido Social que están viviendo. Con las frases «Nos están matando» y «SOS Colombia», la población denuncia las sistemáticas violaciones a los derechos humanos cometidas por militares y policías al mando del uribista Iván Duque que ya dejan 19 personas muertas, 800 heridas, 87 personadas desaparecidas y acusaciones de abuso sexual, violación.

Lo que partió como jornadas de protesta contra una reforma tributaria que castigaba a la mayoría de la población se ha transformado en un Estallido Social que exige cambios en Colombia de profundización democracia, anticorrupción y reforma de la estructura neoliberal del Estado.

El anuncio de este domingo de retirar el polémico proyecto del Congreso no bastó para calmar la rabia de un pueblo -principalmente su juventud- harto de años de postergación de un sistema que no sirve a su gente y que transformado a Colombia en un Narco-Estado.

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Lamentablemente, como suele ocurrir con el desprecio a la vida que tiene el ultraderechista uribismo, el saldo ha sido alto: en una semana de manifestaciones, el país sudamericano presenta ya 19 personas muertas, 800 heridas, 87 personadas desaparecidas y múltiples acusaciones de abuso sexual, violación y disparo con arma de fuego de agentes del Estado hacia manifestantes, según datos de la Defensoría del Pueblo (26 víctimas fatales según la ONG Temblores).

Desde Naciones Unidas manifestaron su alerta ante la grave situación de violación de los derechos humanos y denunciaron disparos y agresiones de la policía contra una de sus misiones en el país. Asimismo, compartió el listado completo de las 87 personas que según las denuncias siguen desaparecidas, la mayoría en la ciudad de Cali (35).

La Campaña Defender la Libertad es Asunto de Todas, que reúne a varias organizaciones de derechos humanos, denunció que sólo ayer martes 305 personas fueron heridas "por el accionar desproporcionado de la Policía Nacional".

Los y las manifestantes apuntan directamente a Iván Duque y a su ministro de Defensa, Diego Molano, como los responsables de estos crímenes y exigen la renuncia de ambos, y pese su actuar criminal, las protestas no se detienen y se espera que hoy miércoles sea una nueva álgida jornada, día en que se cumple una semana del inicio de éstas y que en que está convocado a un paro nacional.

De hecho, cerca de esta medianoche un grupo de personas atacó y prendió fuego un recinto policial en Bogotá, dejando cinco policías heridos.

En el clima de militarización de las calles, el sonido de los cacerolazos ha marcado cada noche en decenas de ciudades.

Finalmente, cabe puntualizar que el padrino de Iván Duque es el expresidente y exsenador (en este momento procesado por la justicia) Álvaro Uribe, político de ultraderecha a quien la población señala como el poder en las sombras. Uribe publicó en Twitter un comentario llamando a los soldados a usar sus armas contra la población que se manifiesta (como ha sido siempre su política), el que fue borrado por la misma red social.