Serían $433 millones los que las Redes Asistenciales del Ministerio de Salud, durante la gestión de Arturo Zúñiga (UDI), no cobró a 17 clínicas privadas, dejando al Estado sin el pago del arriendo de 141 ventiladores mecánicos. El Sanatorio Alemán de Concepción sería uno de los establecimientos de salud que no pagó.

Por Juan Contreras Jara

El pasado martes, 28 de septiembre, la Contraloría General de la República emitió un informe en el que detalla una serie de normativas aplicadas al cobro del arriendo de 141 ventiladores mecánicos que no fueron cobrados por la subsecretaría de Redes Asistenciales del Minsal a 17 clínicas privadas.

Se trata del informe  N° 510/2020 de Contraloría, que develó un verdadero «perdonazo» a 16 clínicas santiaguinas y a una penquista, el Sanatorio Alemán, por el uso de ventiladores durante la gestión del UDI Rodrigo Zúñiga, iniciada el 12 de julio de 2019 y terminada en noviembre de 2020 debido a serias irregularidades ligadas a gastos sin respaldo, servicios de salud con desfalcos financieros, arriendo de residencias sanitarias, entre otras.

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La investigación de la Contraloría General de la República también advirtió, entre otros, que la subsecretaría de Redes Asistenciales del Minsal habría entregado ventiladores en mal estado o con piezas faltantes, además de advertir que hubieron clínicas desde las que aseguran, nunca recibieron dichos artefactos.

A esto se le suma que los establecimientos privados de salud adquirieron los ventiladores mecánicos saltándose al servicio público correspondiente y sin informar administrativamente de su solicitud y recepción, consignó Interferencia.

El hospital clínico UC adeudaría un total de $65 millones y le seguirían, la Clínica Red Salud Bicentenario con $46 millones, Clínica Las Condes con una deuda de $40 millones, Nueva Clínica Cordillera con $36 millones y la Clínica Sta. María con $31 millones, siendo los establecimientos que más le deben al Estado por el arriendo de los referidos ventiladores mecánicos.

Arturo Zúñiga fue la mano derecha del otrora ministro de Salud Jaime Mañalich, durante su desastrosa administración del Minsal al inicio de la pandemia que incluyeron diversos problemas de gestión operativa como por ejemplo las irregularidades en la compra de quipos de ventilación mecánica y su administración en las redes de asistenciales, situación respaldada por el informe de la Contraloría General de la República.