Finalmente el canciller Olaf Scholz autorizó el envío de tanques Leopard 2 de fabricación alemana a Ucrania para hacer frente a la invasión rusa. Así, la OTAN se involucra aún más directamente en el conflicto y Alemania rompe su tradición de no entregar armas de manera oficial a países en medio de un conflicto.
Por Alejandro Baeza
En un intenso tira y afloja al interior de Alemania, finalmente el gobierno encabezado por el socialdemócrata Olaf Scholz autorizó el envío desde Polonia de tanques Leopard 2 como suministro de guerra a Ucrania para enfrentar la invasión de Rusia. Esto porque tanto la izquierda como el ala más progresista del SPD en el poder se oponían al envío de armas.
De acuerdo a información entregada por Die Spiegel, se trata de al menos una compañía del modelo Leopard 2A6, la cual provendrá del ejército alemán (Bundeswehr).
Además, el gobierno alemán había señalado que consideraría la solicitud previa de Polonia de obtener permiso para transferir 14 tanques pesados Leopard 2 a Ucrania (al ser de fabricación alemana, necesitan autorización de Berlín para hacer envíos a otros países).
No obstante, las presiones no eran sólo internas, pues tanto Ucrania como Estados Unidos, Reino Unido y la misma Polonia fueron actores fundamentales que estuvieron presionando al gobierno germánico para autorizar el envío de los vehículos de combate. El pasado jueves 19 de enero, los secretarios de Defensa de Alemania y Estados Unidos, Boris Pistorius y Lloyd Austin, se reunieron en Berlín para mantener conversaciones sobre nuevas ayudas militares a Ucrania.
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Por su parte, Estados Unidos reunió el viernes 20 de enero en la base militar de Ramstein en Alemania a los cerca de 50 Estados partidarios del «Grupo de Contacto sobre Ucrania», «con el fin de elaborar un amplio paquete de ayuda militar para el país atacado por Rusia» según cita el medio Deutsche Welle.
Así, Europa escala su involucramiento directo en la guerra pese a la advertencias de Rusia, que hasta ahora no ha señalado cómo va a responder este hecho. La última vez que tanques alemanes enfrentaron el ejército ruso fue en el denominado «Frente Oriental» de la Segunda Guerra Mundial, en que las wehrmacht hitlerianas fueron derrotadas por el Ejército Rojo soviético.
Los Leopard 2 son tanques de fabricación alemana equipados con dos ametralladoras, una en una montura coaxial y la otra en una montura anti-aérea, un cañón para 27 cargas almacenadas en la parte delantera de la barcaza, a la izquierda del puesto del conductor, con 15 cargas adicionales almacenadas en el lado izquierdo del soporte de la torre, que está separado del compartimento de combate por una puerta manejada con un sistema electrónico.