Fue a una semana de iniciado el Estallido Social, que se perdió la huella de Geraldo Monares, de por entonces 55 años de edad en la comuna de Hualpén, Región del Biobío. A casi 4 años de su desaparición, su familia comenta que la investigación volvió a cero luego de que la principal testigo se desdijera de la versión que mantuvo por años. Lo anterior llama profundamente la atención de uno de los abogados querellantes en el caso, Fernando Leal, quien adelantó a Resumen que solicitarán nuevas diligencias a Fiscalía y que entre ellas estará investigar el repentino cambio de relato.

«No hay nada, no hay nada de avance», se lamenta Marioly Rocha, una de las sobrinas de Geraldo Monares, el poblador hualpenino que desapareció el 28 de octubre de 2019 y de quién Fiscalía no tiene, a la fecha, ninguna pista. 

Ante esta situación, uno de los abogados querellantes, Fernando Leal, indicó a Resumen que, «nos parece impresentable que a 4 años, el Estado de Chile no tenga una respuesta ante el desaparecimiento de un ciudadano en medio de un Estado de Derecho y democrático, que respeta la garantías de las personas».

Por su parte, Rocha asegura que no se han hecho nuevas diligencias y que luego de reunirse con el fiscal a cargo, Nelson Vigueras, «él me dice que no hay más indicios, no saben por donde buscar o qué línea de investigación seguir. Estamos peor que al principio».

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En mayo de 2022 se presentó una querella contra quienes resulten responsables, por los delitos de secuestro calificado e inhumación ilegal, en el Juzgado de Garantía de Talcahuano. Dos años antes, el INDH había interpuesto un recurso de amparo en favor del poblador de 55 años de edad, pero luego, Sergio Micco, ex director del organismo, ordenó el cese de las acciones por este caso.

Actualmente la investigación se encuentra desformalizada y tras el cambio en la versión del relato de una de las personas citadas a declarar, que apuntaba a Carabineros, la familia de Monares afirma estar en cero con la investigación de su desaparición. Además, comentan que desde el Servicio Médico Legal tampoco han reportado algún hallazgo.

«Yo no sé si creer que el SML lo avise a tiempo. Hemos conocido casos de osamentas que han aparecido años después y han estado otros años más en el SML y recién ahí ubican a las personas. El fiscal me dijo que esto no iba a ocurrir, porque ellos tienen que estar chequeando semanalmente, pero yo no confío, fui durante un año, todas las semanas y nada», expresó Marioly Rocha, sobrina de Monares.

El vuelco en el caso de Monares y las peguntas que surgen desde la parte querellante

Fue el relato de una familiar de Geraldo Monares el que vinculó su desaparición con Carabineros. Durante años se matuvo, hasta que en junio pasado, cuando la testigo clave, cambió su versión.

Según comenta el abogado querellante, Fernando Leal, «declaró describiendo a uno de los carabineros, señalando su estatura, contextura y que incluso había tenido un intercambio de palabras con ellos y muy extrañamente, esta testigo cambia su versión de los hechos y dice que mintió. Nos llama poderosamente la atención».

Según explica Leal, la testigo se habría encontrado con Monares siendo detenido a las afueras del Hogar de Menores Tupahue, donde «fue a visitar a una hija», agrega. «Ella dijo que salió a una hora y por una puerta determinada a la calle y resulta que en el libro del hogar, efectivamente aparece que ella estuvo ese día, a esa hora y en ese lugar. También los detectives vieron copias de las cámaras de seguridad apostadas a ese lugar, cuando dice que se encontró a Geraldo siendo detenido y efectivamente en las cámaras que enfocan el lugar de salida, dan cuenta de que ella aparece en las imágenes de video».

Quienes no aparecen en la grabación son, según el abogado querellante, el desaparecido Geraldo Monares y el grupo de carabineros que lo habría detenido. «Hay varias cuestiones que hay que aclarar», acota.

Geraldo Monares, padecía de esquizofrenia y discapacidad intelectual y a cuatro años de su desaparición de Hualpén, su sobrina expresa total desesperanza en su caso. Ante esta situación de incertidumbre, la pobladora y sus abogados solicitarán a Fiscalía nuevas indagatorias para que, entre otros, se aclare el determinante cambio de versión de la principal testigo. 

«Es necesario que el Estado de Chile, a través de su órgano persecutor, dé una respuesta clara y contundente de lo que ocurrió acá. Hay que transparentar porqué cambió la versión. Ella dice simplemente que mintió, pero no da mayor razón de sus dichos» informa Leal, concluyendo que, «es una situación de sumo preocupante que una testigo, que declaró en distintas instancias, que dio precisión respecto de caras, de horarios, algunas de estas situaciones investigadas y acreditadas, luego desista, o sea, ¿qué le hizo cambiar de opinión? ¿qué operó acá? ¿hay terceros involucrados? ¿hay amenazas? ¿hay algún tipo de presión? bueno, son cosas que se tendrán que aclarar».