La emblemática fábrica de calzados Albano cerró sus puertas en noviembre de 2018 declarándose en bancarrota dejando a más de cien trabajadores abandonados a su suerte. A más de 3 años de los masivos despidos, cuatro ex trabajadores de la fábrica han fallecido esperando justicia.
Por Branco Moreno
En primera instancia, la familia dueña de la empresa, a cargo de Cristian y Jessica Aravena Rivas, declararon a la prensa que este proceso era parte de un acontecer internacional, que la competencia era descarnada y entregaron calma a los trabajadores de la empresa, diciendo que se cumplirían los contratos y se reconvertirían los trabajos.
Nada de eso ocurrió. A dos años del cierre, el Juzgado de Letras del Trabajo de Concepción condenó a la empresa a cancelar el pago adeudado de los salarios de 141 trabajadores, lo que equivale a más de mil millones de pesos.
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Por otra parte, a través de una causa civil paralela interpuesta por el liquidador de la empresa, se demostró el ocultamiento de dinero por parte de los dueños, por lo que están en calidad de imputados y con arraigo nacional.
De esta forma se demostró que los dueños de la fábrica habrían trasladado dineros a otras empresas para no pagarle a los trabajadores que habían levantado y mantenido a la fábrica de calzados por años.
Juan Rivera Ortiz, ex Jefe de Fábrica, nos relató que "llevaba 40 años de servicio, estaba recién comenzando una pyme para solventar una buena vejez, me enteré de la quiebra el mismo día, justo yo me encontraba recién operado. Todo lo que se hizo por parte de los dueños fue a la espaldas de los trabajadores".
Juan Carloz Huechullan trabajaba en la sección de suelería de la fábrica, llevaba 21 años allí y 13 como dirigente sindical. Sobre la quiebra y los despidos explicó que "para ese momento se encontraban en una negociación colectiva que no estaba dando sus frutos, el dueño de la fábrica les indica que se tienen que ir de vacaciones porque habían problemas con el casino.
" Estuvimos 3 días de vacaciones, pero recabando antecedentes de la empresa, cuando nos enteramos por la prensa de la quiebra de la fábrica", complementó el trabajador.
Todo ocurrió sin ninguna explicación o reunión de antemano, sin posibilidad de reacción ante un eventual despido masivo e impago. "Fue como un portazo, mucho de los trabajadores era gente de edad que llevaba 30, 40 años en la fábrica, no sabían desempeñarse en otra cosa, lamentablemente tenemos 4 compañeros que ya fallecieron esperando a la justicia".
Cabe estacar que los tribunales ya les ha dado la razón 2 veces a los trabajadores de Albano, en el Juzgado de Letras del Trabajo y en la Corte de Apelaciones, sin embargo los representantes de la empresa no hacen más que dilatar el proceso.
En tanto esperan el dictamen de la Corte Suprema, se estarán manifestando en a las afueras de los tribunales penquistas los lunes, miércoles y viernes de 09:00 horas hasta el medio día para seguir visibilizando su problemática.
Un drama que lleva más de 3 años y en donde queda demostrada la conducta dolosa y usurera de los inversionistas, que prefirieron mover sus dineros fraudulentamente antes que pagarle a sus trabajadores lo que les corresponde por derecho.