Cuando el resultado del último estudio reveló la ausencia de Tomé entre los territorios que participan de sus actividades, el programa Activa tu Presente con Memoria se propuso migrar hacia dicha comuna para descubrir y gestar ahí su nueva propuesta: el CICLO DE AUTOFORMACI"N DE VERANO PARA MUJERES.
Autora: Alejandra Villarroel Sánchez*
Superando la convocatoria esperada en todos los talleres, 90 mujeres fueron parte de la experiencia en la Ex Escuela de la Caleta Chica de Cocholgüe, espacio en estado de recuperación comunitaria donde cinco invitadas guiaron el acercamiento a conocimientos y herramientas de aprendizaje relacionadas a la Antropología, el Cine, las Comunicaciones, la Voz y la Performance. Si bien los contenidos fueron diseñados pensando en potenciar a la colectiva de performance La Marea, el llamado a participar hizo eco en otras mujeres locales, mayoritariamente jóvenes estudiantes y trabajadoras provenientes de las comunas Tomé, Concepción y San Pedro de La Paz, pero también vecinas de la misma caleta.
"Ese aspecto confirma la necesidad cultural que existe aún en época de vacaciones de verano, las que hoy significan contar con un tiempo destinado no sólo al ocio, sino al goce de aquellas actividades en las que durante el año no es posible participar ni asistir" comenta Alejandra Villarroel Sánchez, gestora del ciclo, agregando que "pese a la resistencia e incluso cierto grado de desconfianza frente a propuestas artísticas culturales que se desarrollen en la Caleta, la respuesta vecinal que tuvimos fue extraordinaria y nos alienta a seguir dando fuerza a las comunidades que desean autogestionar su educación, ese sería un paso importante a dar en el contexto social actual" manifestó la creadora de ACTIVA TU PRESENTE CON MEMORIA.
La experiencia tuvo entre sus objetivos centrales fortalecer la autonomía, acercando a las participantes diversos modos de hacer y de entender los procesos colectivos desde y hacia el conocimiento desarrollado por mujeres. Confianza, comunicación, mutua escucha, pensamiento crítico, colaboración fueron algunas de las herramientas y habilidades ejercitadas durante los cuatro talleres desarrollados en la Ex Escuela de Cocholgüe.
Luego de realizados, se constató que existe una enorme necesidad de aprender creativamente en espacios vecinales. En ese sentido, el ciclo aportó a que la comunidad pudiera reconocer el poder que posee para autogestionar, en su propio entorno comunitario, alternativas educativas transformadoras que contrarrestan el lucro desatado por el actual modelo económico cultural que rige al país y que interviene en todas las áreas de los desarrollos sociales humanos.
"Esa toma de conciencia se puede lograr a través de la educación no formal. Precisamente, algo que este espacio de libre acceso estimuló. Específicamente la conciencia del aprendizaje autónomo como una experiencia personal constante que se construye no en las instituciones, sino en el cotidiano, pero también la consciencia del aprendizaje como una herramienta colectiva intencionada para la emancipación territorial, política y creativa más allá de las individualidades, en el encuentro y convivir con otras personas teniendo un propósito común" plantea la gestora Alejandra Villarroel.
A cargo de guiar el taller "Resuena. Exploración del sistema vocal", la compositora, cantante y pedagoga Claudia Melgarejo comenta que el ciclo "significa la ampliación de una visión acerca de la oralidad que tengo desde que empiezo a conocer la cosmovisión campesina ¡hace como 15 años! La oralidad transmitía saberes que, de forma súper pertinente, satisfacía necesidades de los individuos jóvenes en lo que a proyecto de vida se refiere, pero con el cambio de condiciones en el campo, en el campesino, el rol del adulto mayor o el anciano también cambia y es así como hoy en día lo relegamos a un lugar cómodo y entretenido pero dónde no moleste. Entonces la transmisión de estás sabidurías se quiebra y queda en algunos espacios, en algunas personas. En nuestra cultura urbanocéntrica, la formación académica empieza a agarrar mayor importancia que la sabiduría popular, porque ésta última está quebrada y disfuncional" explica y sostiene que "con esa sed en mi alma, el ser invitada a participar como tallerista en esta escuela de autoformación, me hace sentir que estoy remendando en parte el espacio abierto (hoy sediento) que queda en cuanto a educación informal. El uso de la voz ha sido mi ruta y he adquirido sabidurías y experiencias que me permiten entregar las herramientas para las exploradoras de otros saberes, para que cunda, para que crezca en las visiones de otras mujeres".
Para la publicista y Directora de Comunicaciones de ABOFEM Chile, Daniela Watson Ferrer, quien estuvo a cargo de guiar el taller "Comunicación para el cambio social", la experiencia fue inolvidable "nos encontramos entre mujeres de distintas edades y realidades, que vivíamos distintos feminismos, todas con el objetivo de aprender cosas nuevas juntas, que pudiéramos incorporar a nuestros espacios de lucha. Y todo esto, con el mar de fondo" expresó.
¿Siempre aprendemos? Sí, por eso la tarea hoy es también desaprender, derribar aquellos anclajes que impiden la exploración auténtica y limitan el proceso de descubrir. Es en esa inflexión donde la autonomía cumple un rol vital, tal como señala la gestora del ciclo "nuestra propuesta busca potenciarla, entendiendo que aprender de modo autónomo es un placer y al mismo tiempo un desafío, porque la libertad de elegir qué temas estudiar, qué historias investigar, qué lenguajes practicar o desde dónde crear algo nuevo, todo eso exige conocerse mucho, lo que siempre significa saber sobre qué historias, privilegios, (des)memorias, carencias y deseos estamos o queremos estar de pie y quiénes están de pie junto a nosotras en esas certezas" manifestó Alejandra Villarroel.
Difundir descentralizadamente la investigación y los materiales de archivo del Movimiento Pro Emancipación de las Mujeres de Chile (MEMCH) en un territorio que no es Concepción, es uno de los aspectos destacados por la antropóloga María Fernanda Morales Ortiz, tallerista de "Dónde estuvieron mis compañeras" "en la región del Biobío también existe una centro-periferia que hace que hayan sectores a los que no vamos, o no nos hacemos cargo como investigadores de ir. Eso me pareció muy relevante, además el espacio se planteó desde un inicio como una experiencia autoeducativa, es decir, el proceso de aprendizaje debía ser horizontal, donde más que ir a "entregar conocimientos" planteara una serie de preguntas respecto de la historia del movimiento de mujeres y feministas en la región" señala la antropóloga y agrega "eso es potente pues viene a desestabilizar la lógica de transmisión vertical de conocimiento y permite instaurar un nuevo lugar de conocimiento, donde como investigadora y mujeres con conocimientos propios nos encontremos a dialogar. Y, por último, esta instancia permitió las lecturas de las mismas participantes, esa mirada de las asistentes fue relevante en tanto hicieron una lectura crítica de la historia del MEMCH y aportaron nuevos elementos para pensar la acción de mujeres en territorios específicos".
Desde la perspectiva de las estudiantes, Lenia Sepúlveda, pedagoga e integrante de la Colectiva la Marea, participar de la experiencia "significó ver y con mucha felicidad el interés de mujeres por educarse en torno a temáticas feministas, fue una introducción, por llamarlo de alguna manera, a este marzo feminista que se viene con mucha lucha territorial por conseguir espacios para nosotras, saber que hay más mujeres que en una ciudad tan conservadora como Tomé que se atreven a pensar y actuar diferente fue una sorpresa muy grata. Además, las temáticas de los talleres aportaron de manera práctica a nuestra labor como colectiva feminista y eso es algo que se agradece".
Planteada como un Laboratorio de Performance "Cuerpo y Calle. De lo personal a lo colectivo", guiado por la artista visual Cheril Linett, la segunda semana del ciclo se vivió con los sentidos puestos primero en acercar a las participantes, desde lo testimonial, a la propuesta personal que Cheril Linett ha desarrollado como artista visual en el lenguaje de la performance, revisando aspectos generales de su proceso creativo e intervenciones en espacios públicos encabezando el proyecto Yeguada Latinoamericana.
"Fue hermoso conocer Tomé, la caleta de Cocholgüe es un lugar muy especial que me dejó encantada. El laboratorio sin duda significó muchísimo aprendizaje, proponer una exploración a mujeres diversas que no se conocían todas entre sí, trabajar la intimidad y la complicidad cuando no nos conocemos es complejo, pero fuimos con cuidado y logramos generar una experiencia muy bella de exploración en el mar" recuerda "me encantó verlas a todas muy dispuestas a experimentar y con muchas preguntas e inquietudes que de seguro con el tiempo se irán respondiendo o convirtiendo en más preguntas" agrega "me siento muy agradecida de la confianza e invitación que me extendió Activa tu Presente con Memoria para impartir el taller y también agradecida de cada una de las personas que participaron de esta instancia maravillosa" declaró.
Luego, en una segunda parte, los ejercicios de escucha, observación, respiración, coordinación, atención y mirada periférica prepararon la experiencia que se activaría después, en otro escenario, uno que expandió el aula hacia el contacto directo con la naturaleza. En esa experimentación el grupo conversó sobre lo que cada una elabora, desde su cuerpo y con otros cuerpos, respecto al propósito de una determinada acción performática. Esas subjetividades también fueron abordadas al comenzar la jornada, generando una nube de palabras reveladoras de las nociones o problematizaciones individuales sobre performance y violencia de género.
A partir de ambos ejercicios, emergieron los conceptos restaurar y componer abordados durante la tarde final del laboratorio. Por un lado, restaurar el tejido social socavado por el extractivismo, volver a trenzar una a una las corporalidades habitantes de un territorio amenazado por las transnacionales que, al mismo tiempo, persiste en su abundancia de bosque marino y en la resistencia que conlleva el cuidado y defensa de esa fuente de vida, bien común altamente biodiverso. Por otra parte, componer una acción grupal sintiendo el peso histórico y físico de las algas, materia orgánica que articuló la intervención a borde de playa en caleta chica.
Un momento importante dentro de la performance realizada la tarde del viernes14 febrero, fue el gesto final de trenzarse, que constituyó un modo de aprendizaje basado en proyecto, es decir, una construcción colectiva en la que todas asumieron distintos roles orientadas a un objetivo común. Las 15 participantes, ofrendaron e hilaron intenciones mediante el gesto de pasar por sus cuerpos y posteriormente trenzar algas, una con otras, hasta que cada integrante completara el traspaso.
Para Natalia Aravena Espinoza, integrante de las colectivas tomecinas La Marea y Buena Tela, haber participado de las jornadas de autoformación para mujeres fue "un espacio de recordar colectivo de la memoria con talleristas que nos enseñaron muchas cosas al mostrarnos sus maneras y disciplinas de vida, finalmente lo más bonito y gratificante fue hacer una intervención junto a todas las mujeres que participaron en el laboratorio de performance, en poco tiempo con nuestro talento e imaginación, surgió la idea de utilizar las algas, pasándolas por el cuerpo. Yo fui quien las recibía, pude sentir el peso que mis compañeras cargaban" comentó y agrega "fue una experiencia nueva para mí que me gustaría volver a repetir y replicar en el tiempo, al final del ciclo una se da cuenta de las herramientas que ya tiene y que puede potenciar en los fines propios y que una estima conveniente, al momento del poner el cuerpo como elemento de lucha".
La artista visual, investigadora y performer Bárbara Gajardo participó del ciclo como parte de la residencia artística que se encuentra desarrollando en Tomé "fue una experiencia muy necesaria para este territorio, creo mucho en la autoformación y me parece que sobre todo los primeros seminarios del ciclo estuvieron muy buenos, muy interesantes y se agradece un montón que nos hayan invitado en el marco de nuestra residencia".
María Jesús Vargas es Psicóloga y forma parte de la Colectiva La Marea, comenta "con los talleres pudimos conocernos como mujeres tomecinas, aprender mutuamente y conocer la experiencia del movimiento feminista en Chile que muchas veces se desconocer, también ter la oportunidad de crecer entre nosotras y poder hacer mayores redes".
Por su parte, Sonia Pérez, estudiante de Psicología también integrante de La Marea, señala que para ella la escuela de autoformación significó bastante "porque pude entender cómo el conocimiento fluye más de manera colectiva y entre mujeres, poder hacer preguntas e ir aprendiendo la una de la otra" además destaca el taller de cine, instancia que le permitió "resignificar las luchas que tuvieron mis antepasadas, aprendí también que aún quedan luchas que dar y que el movimiento feminista venía desde mucho antes, algo que yo no sabía y con lo que entendí lo maravilloso que es poder nutrirte junto a más mujeres por una misma causa".
El registro del Laboratorio de Performance fue realizado por la comunicadora audiovisual y fotógrafa Karen Bahër y ya se encuentra en proceso de edición. Se trata de cinco microcápsulas y un video resumen que será estrenado durante el primer semestre vía redes sociales vinculadas al programa en Instagram @activatupresente y en Facebook Activa Tu Presente Con Memoria, siendo alojados en el canal Vimeo del programa.
El trabajo de Karen Bahër busca ser un testimonio visual y testimonial recogiendo imágenes de la performance en la caleta de pescadores artesanales de Cocholgüe y algunas de las voces de las mujeres que participaron de la experiencia.
Este material, junto a la sistematización e intercambio de visiones serán presentados de modo presencial en Tomé, Concepción y San Pedro de La Paz, mediante una serie de actividades de mediación durante el segundo semestre de 2020, cuando se levante la actual cuarentena.
* Periodista Investigadora en Cultura, Educación y DDHH. Fundadora del programa «Activa tu Presente con Memoria», educación artística no formal con enfoque de Derechos