Aun ad portas de su salida, la administración del INDH, comandada por el cuestionado Sergio Micco, sigue actuando bajo total falta de probidad. A la voltereta que se dio el instituto la semana recién pasada, comunicando que no presentaría querellas por delitos de lesa humanidad en contexto de Estallido Social, después de haberlo anunciado pomposamente a la opinión pública, se conoció durante esta jornada que buscaron por medio de tribunales, revocar una sentencia por despido discriminatorio de 2021 en su contra.

Por Juan Contreras Jara

Intentando revertir una condena por el despido discriminatorio del jefe de Unidad de Estudios del INDH, quien informó a Sergio Micco sobre las violaciones sistemáticas de los DDHH durante la Revuelta, el director del instituto presentó un recurso de apelación, que fue finalmente rechazado el pasado 9 de mayo, manteniendo la pena contra el instituto.

De esta manera se mantiene la condena que pesa sobre el INDH, que deberá indemnizar al trabajador y mantener por tres meses las correspondientes disculpas públicas hacia el afectado en su sitio web, según informó INTERFERENCIA, durante esta jornada.

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Osvaldo Torres, jefe de Unidad de Estudios del INDH, fue despedido de manera arbitraria por el cuestionado Sergio Micco, según ratificó en su condena el Primer Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago en 2021. La desvinculación se produjo luego de que el trabajador informara sobre la violación sistemática de los DDHH en su informe anual de 2019.

Sumado a la arbitrariedad del despido por parte de Micco, este además contrató a personal externo para que realizara un nuevo informe relativo sin siquiera consultarlo con el consejo del instituto. A esto hay que agregar la modificación que realizó el director del INDH al tipo de cargo que representaba el de jefe de Unidad de Estudios, de técnico a exclusiva confianza, movida que utilizó para despedir a Torres.

La labor del INDH, durante la dirección de Sergio Micco, acumula una serie de cuestionamientos en materia de defensa de los Derechos Humanos, vulnerados durante el Estallido Social. La última de ellas surgió por la voltereta del consejo del instituto, del que también forma parte Micco, de no interponer ninguna querella criminal contra los altos mandos de Carabineros, por crímenes de lesa humanidad cometidos a partir del 18 de octubre de 2019.

En el Biobío y a través de una tutela laboral en su contra, se conoció el abandono por parte de de Sergio Micco y el instituto de la desaparición del poblador huapenino Geraldo Morares, presentando solo un recurso de amparo en diciembre de 2019, pero no persevarando en la causa pese a la petición de su familia y a que ocurrió en contexto de Estallido Social.

En la tutela laboral presentada contra Micco se especifica que, «cuando mi representado insta a la autoridad para que se presente una querella por desaparición forzada de una persona que hasta al día de se encuentra desaparecida en el contexto del Estallido Social, el director se niega a ello»