Por Joaquín Pérez
El 19 de julio de 1979 las tropas del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) entraban victoriosas y aclamadas por la multitud a Managua, capital de Nicaragua, poniendo fin a décadas de lucha del pueblo nicaragüense en contra de la dictadura de la dinastía Somoza (1935-1979) impuesta por el imperialismo norteamericano, tras el asesinato del líder patriótico Augusto César Sandino (1934).
Ya desde los años 50 habían comenzado las primeras protestas, revueltas y alzamientos contra la dictadura de Anastasio Somoza García, el "Tacho" Somosa, en 1961 heredero de diversos grupos patrióticos y democráticos, nace el FSLN con Carlos Fonseca (caído el 7 de noviembre 1976), Tomas Borges, Silvio Mayorga (caído el 27 de agosto 1967) y Germán Pomares (caído el 24 de mayo de 1979) entre sus fundadores, ayudados por antiguos combatientes de Sandino, pero fuertemente influenciados durante su desarrollo por las victoriosas revoluciones Cubanas (1959) y Argelina (1962).
Son muchos años de lucha clandestina en los que el FSLN vivirá divisiones internas y fraccionamientos, básicamente debido a la estrategia de seguir en el proceso revolucionario. Así surgen las facciones: Insurreccionalistas o Terceristas, Guerra Popular prolongada (GPP) y Proletarios.
A mediados de los 70, el ejército estadounidense sufre su derrota en Vietnam, en Latinoamérica Torrijos (Panamá) refuerza su desafío nacionalista al poder geoplítico norteamericano, y llega al poder (1977) el religioso bautista Jimmy Carter en Estados Unidos, a quien incomoda el régimen somosista por la grosera y masiva violación de Derechos Humanos. El 10 de enero de 1978 es asesinato a tiros del periodista antisomocista Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, al año siguiente la guardia nacional somosista asesina al periodista estadounidense Bill Stewart. Ambas acciones motivarán el retiro gradual del apoyo norteamericano a la tiranía nicaraguense.
En paralelo, el FSLN va alcanzando acciones de creciente envergadura: A fines de ese año desarrolló la llamada "Ofensiva de Octubre" que contempló alzamientos rebeldes en Masaya, San Carlos, Río San Juan; al mismo tiempo que da inicio a la guerrilla permanente, abriendo el Frente Norte «Carlos Fonseca».
El 22 de agosto de 1978 un comando sandinista tomó por asalto el Palacio Nacional e hizo rehenes a los legisladores presentes afines al entonces dictador, que fueron canjeados por los presos políticos sandinistas, entre ellos el comandante y fundador del FSLN Tomas Borges, líder de la tendencia GPP.
En septiembre de 1978 se inician los levantamientos insurreccionales de León, Chinandega, Estelí, Masaya, Matagalpa y Managua. La salida de Tomás Borges ayuda a destrabar el proceso de unidad sandinista que se materializara finalmente en marzo de 1979, con la firma del acuerdo de unidad por parte de los representantes de las tres fracciones y se decide impulsar la lucha.
En junio de 1979 se hace el llamamiento a la huelga general y a la "ofensiva final" abriendo varios frentes de lucha guerrillera; al ya mencionado Frente Norte, se agregan el Frente Sur «Benjamín Celedón», el Frente Central «Camilo Ortega», el Frente Occidental «Rigoberto López Pérez», el Frente Oriental «Carlos Roberto Huembes», el Frente «Pablo Úbeda», que también operaba en la zona central, y el Frente Urbano de Managua, la capital.
El 19 de julio de 1979 las columnas guerrilleras del FSLN entran en Managua, con un amplio respaldo popular, consumando la derrota de Anastasio Somoza Debayle
Numerosos latinoamericanos participan de aquella gesta anti-imperialista, muchos de ellos provenientes de los países del Conosur, sometido a bestiales dictaduras.
No fue casual que el dictador nicaragüense terminara ajusticiado en Paraguay (donde el dictador Alfredo Stresner le diera refugio) el 17 de septiembre de 1980, por parte de un comando de PRT-ERP Argentino, encabezado por Enrique Gorriarán Merlo.
Chile no estuvo ausente de la gesta Sandinista, ya desde 1928 nuestra poetiza Gabriela Mistral mostraba su rechazo a la invasión Nortemericana de Nicaragua y declaraba su admiración al rebelde Augusto César Sandino, a quien definió como «general de hombres libres», en contraposición al calificativo de «bandido» que el presidente de los EE.UU. de la época, Herbert Hoover. hacía de él. La Mistral definía a Sandino como "hombre heroico, héroe legítimo, como tal vez no me toque ver otro", cuando la propaganda norteamericana hablaba de de "insignificante jefe desequilibrado". La poeta fue más allá y realizó numerosas gestiones para conseguir apoyos de líderes latinoamericanos a la gesta de Sandino y para tratar de formar una "legión hispanoamericana en Nicaragua" en apoyo a éste, motivando a los jóvenes "para ofrecerle a Sandino lo mejor que puede cederse, que es la sangre joven, y una lealtad temeraria y perfecta que sólo la juventud puede dar" (…) "la sangre joven nunca ha sido mal aprovechada cuando se entrega por una carta justa y libertaria".
Décadas más tarde, numerosos combatientes chilenos participaron de revolución sandinista, varios de ellos dejaron la vida en aquella tierra, vaya para ellos el homenaje como héroes de la independencia latinoamericana, de la lucha anti-imperialista y por la libertad de nuestros pueblos:
Puedes leer también: A 40 años de la caída del primer chileno en la guerrilla sandinista: Juan Cabezas Torrealba
Juan Cabezas Torrealba, ("Hernan") militante del MIR, Caído el 9 abril 1979 en el Departamento de Rivas, Nicaragua.
Mario Guerra Ruiz, ("Jorge") militante del MIR. Cayó combatiendo en Sapoá, Nicaragua, el 1 de julio de 1979.
Days Huerta Lillo, ("Gualberto") militante de las Juventudes Comunistas de Chile. Cayó abatido durante el asalto al búnker del dictador Anastasio Somoza, en Managua, Nicaragua, en julio de 1979.
Edgardo Javier Lagos, ("Payo") militante de las Juventudes Comunistas de Chile. En Nicaragua, fue herido en combate, pocos días antes del triunfo de la Revolución Sandinista, el 15 de julio de 1979 en el sector La Calera.
Miguel Enrique Rojas Contreras, ("Cachencho") militante de las Juventudes Comunistas de Chile. Falleció el 1 de febrero de 1980, en un accidente automovilístico, mientras cumplía labores del servicio, como uno de los organizadores del Ejército Popular Sandinista en la región de Matagalpa.
Juan Cortes Zuleta, ("Ruben") militante del Partido Socialista, cayó en Nicaragua en 1982.
Alberto Geraldo Bonilla, ("Flavio") militante del Partido Socialista. Cayó en Puerto Cabezas, Nicaragua, en julio de 1982.
Jorge Olivares Vega ("Emilio") muere regresando de misión el 27 junio 1984
José Antonio Ibáñez Godoy, ("Julio") militante de las Juventudes Comunistas de Chile. Cayó el 3 de mayo de 1987, combatiendo en Nicaragua.
Luis Emilio Mendoza, militante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez. Pereció durante una emboscada enemiga, en Pastama, Nicaragua, el 17 de noviembre de 1987.
Otros nombres de chilenos caídos en Nicaragua sobre los que no hay mayores antecedentes, son:
Jorge Casares, sepultado en el Cementerio Oriental de Managua.
Víctor Minué Escorza, caído el 4 de julio de 1989 en Nicaragua. Sus restos reposan en el Cementerio Oriental de Managua.
José Silva, sus restos se encuentran en el Cementerio Oriental de Managua.
David Camú, ("Darío"), asesor militar del EPS, muerto en la costa Atlántica de Nicaragua a mediados de los 80
"Jorge", su tumba está en el Cementerio Occidental de Managua.
"Pedro" o "Malberto", su cuerpo está en el Cementerio Occidental de Managua.
"Leonardo Rivas Balmaceda" (nombre de guerra), militante del MIR, caído el 19 de noviembre de 1979 en Nicaragua. Sin mayores datos.
Además, rendir homenaje a los combatientes en Nicaragua que posteriormente cayeron en la lucha guerrillera en El salvador
Roberto Lira Montiel, ("David") militante de las Juventudes Comunistas de Chile. Combatió en Nicaragua durante la guerra revolucionaria. En 1980 se trasladó a El Salvador para luchar junto a ese pueblo hermano. Cayó emboscado en enero de 1981, en Santa Ana, El Salvador.
Charlo Reyes, militante del Partido Socialista. Participó en su calidad de cirujano, en Nicaragua y después en El Salvador, donde cayó abatido el 27 de enero de 1983, en el puesto de sanidad de La Palma.
Roberto Diez Diez, muerto en El Salvador 1983.
Volodia Alarcón Martinez, 2 junio 1989, El salvador
Victor Otero, muere en la ofensiva salvadoreña en 1989
Cristian Bascuñan, ofensiva salvadoreña 1989