[resumen.cl] Josu Urrutikoetxea Bengoetxea  o «Josu Ternera», último líder histórico de ETA, la organización armada del Movimiento de Liberación Nacional Vasco, fue detenido a sus 69 años de edad en la localidad de Sallanches, en la Alta Saboya francesa -zona limítrofe con Suiza e Italia- mientras se dirigía al hospital de la localidad a recibir atención medica.

ETA (Euskadi Ta Askatasuna) fue creada durante la dictadura de Francisco Franco (1958), responsable de acciones militares de envergadura, entre ellas la ejecución del propio sucesor del dictador, Carrero Blanco en diciembre de 1973, en la que Josu Ternera tuvo algún grado de involucramiento, al ser responsable de la obtención desde el polvorín de Hernani de 3 mil kilos de dinamita para esta acción.

Urrutikoetxea, tenía una extensa vida militante, ya en 1971 debió exiliarse en Francia, pues era intensamente buscado por la policía franquista. Tras la caída de la dictadura, el movimiento vasco no aceptó los términos políticos de la transición pactada y continuaron su accionar armado.

Hacia el año 1980 Josu ya era el encargado militar de ETA. En 1987 tras el fracaso de la negociación de Argel, entre el gobierno español y ETA, asumió la conducción política de la organización.

Josu Ternera ha sido parte de los diversos procesos de negociación entre la organización armada independentista vasca y el Estado español, desde éstas en Argel hasta las de Oslo (2005-2007).

Tal vez por esto tras su detención el ex dirigente en Euskadi del actual partido de gobierno en España (PSOE), Jesús Eguiguren, calificó a Josu Ternera como «pieza clave» en el proceso de pacificación del país vasco y como «héroe de la retirada», un hombre de Estado, para un pueblo sin Estado, que al impulsar la paz, permitió que no siguiera incrementándose la lista de muertos, de una de las guerras internas más largas de la historia europea contemporánea.

Hay que destacar que ETA asumió un proceso de treguas unilatearles desde el 20 de octubre del 2011, en proceso que terminó con la declaración de autodisolución de la organización el 17 de marzo de 2017, declaración leída por el propio Josu Urrutikoetxea.

Los Estados español y francés, se han opuesto, a pesar de las presión internacional y política al interior del país vasco, a todo proceso de negociación política tendiente a la normalización y pacificación del territorio vasco y a pesar que la propia organización  depuso las armas hace ya 8 años y destruyó completamente su arsenal frente a observadores internacionales, continúan la persecución contra los antiguos militantes del independentismo vasco.

Foto: Gara