[resumen.cl] Registros enviados a RESUMEN muestran las graves falencias de infraestructura que se han develado en el Colegio Gran Bretaña de Concepción en una jornada de intensas lluvias. De parte de las y los docentes indican que esta situación ha sido dada a conocer con anterioridad, pero no ha existido respuesta de las autoridades.

La lluviosa jornada de este martes en el Gran Concepción ha estado acompañada de la difusión de registros desde el interior del Colegio Gran Bretaña de Concepción donde se presentan diversas goteras que afectan a la infraestructura, llenando baldes y basureros que se han ocupado como recipientes

En contacto con RESUMEN Ema Duarte, educadora de párvulos del Colegio Gran Bretaña y representante gremial de las y los profesores del establecimiento, informó que esta es solo una de las diversas deficiencias en la infraestructura del establecimiento, la cual corresponde a «verdaderos chorros de agua» que caen desde el techo.

En este sentido, Duarte informó que la institución también cuenta con «problemas con los baños ya que contamos solo con un baño para los profesores», la falta de un sistema de ventilación adecuado en las aulas y de un sistema de calefacción, siendo problemáticas que se arrastran, acusa, desde hace años.

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Ante esta situación, la educadora explicó que esto confirma la decisión de las y los docentes de decidir no volver a las clases presenciales, considerando que «no solo porque las condiciones sanitarias no estaban, sino porque también sabíamos que la infraestructura no está apta para recibir a los niños en clase» en esta época del año, la cual se caracteriza por el frío y las lluvias.

Respecto a denuncias presentadas, Duarte comentó que presentaron su parecer mediante una carta al Servicio Local De Educación Pública Andalién Sur (SLEP), pero que no han recibido respuesta. Asimismo, señala que «nos hemos dirigido también buscando respuestas a la cuadrilla sanitaria directamente en el Seremi de Salud, la cual ha realizado visitas pero tampoco ha podido resolver este problema», lo cual se suma a denuncias que han ingresado vía sistema OIRS.

A modo de cierre, la docente indicó que «como profesores y profesoras estamos preocupados porque no están las condiciones para poder lograr una educación de calidad hacia nuestros niños y niñas», a lo que se suma el deber de proteger no solo la salud del profesorado, sino también del estudiantado en el contexto actual.