[resumen.cl] La semana pasada la Unión Europea aprobó la fusión de las compañías alemana Bayer y estadounidense Monsanto, por lo que ahora sólo la aprobación de Washington para la conformación de esta nueva mega-corporación que abarcará, entre otras cosas, el 70% del mercado mundial de pesticidas.
Con el visto bueno de la Comisión Europea, la fusión de las compañías Bayer AG de Alemania y Monsanto de Estados Unidos (que en la práctica es la compra de Monsanto por parte de Bayer) está sólo a un paso de hacerse efectiva, puesto que la aprobación por parte Washington se ve sólo como un trámite seguro. La aprobación está sujeta a que Bayer venda una serie de activos, que incluyen prácticamente todo su negocio de semillas y un buen número de productos pesticidas y de semillas, pero dado que el sector agroindustrial ya está en muy pocas manos, otras multinacionales del sector igualmente grandes adquirirán con toda seguridad esa parte de la compañía.
Con la concreción de esta unión, dos terceras partes del mercado global de semillas y más del 70% del de pesticidas quedará en poder de sólo cuatro empresas:
En la actualidad, Bayer y Monsanto extienden su dominio al ámbito de los «insumos agrícolas biológicos», explica Verónica Villa, responsable de programas del ETC Group (ONG internacional que trabaja para «vigilar el poder, monitorear la tecnología y fortalecer la diversidad») en México: «Eso significa, por un lado, que se extiende la propiedad privada monopólica sobre más ámbitos comunes (microorganismos, reproducción de los suelos, etc) y, por otra parte, que los cuatro gigantes de la agroindustria se apoderan de componentes cruciales para la seguridad alimentaria global», declaró Villa a la prensa internacional.
Las técnicas para crear «organismos genéticamente alterados de nueva generación», se escabullen de las regulaciones existentes por lo que urge a los Estados a hacerse cargo de la materia y generar una regulación pertinente en favor de los agricultores locales y consumidores, que se están viendo sometidos a las prácticas industriales y comerciales arbitrarias de estas compañías.
*Imagen de activistas en contra de la fusión de las compañías Bayer y Monsanto