EDITORIAL
Esta democracia es un Show
Una encuesta de la Universidad Central concluye que el 79,7% cree que ha habido un aprovechamiento, por parte de los medios de comunicación, de la figura de los mineros atrapados en la mina San José.
Sin embargo, el "aprovechamiento" en que incurren no es gratuito ni aislado, sino que expresa una política de cortinas de humo (ahora de bambalinas), del propio Estado. Intentando ocultar y hacer creer que son minorías aisladas, sectores sociales que pujan por conquistar demandas que, se supone, una "democracia" ha de cumplir.
La huelga de hambre de prisioneros mapuche no pudo ser ocultada en su totalidad, aunque el Estado y su Gobierno libró impune de una serie de "procedimientos"; como la golpiza que recibió la madre del huelguista Ramón Llanquileo, Miriam Pilquiman, por parte de carabineros en el Hospital Regional de Concepción, cuando lo fue a visitar. La amenaza que recibió Waikilaf Cadin, para que depusiera la huelga, de "cargarle nuevos atentados y sumarle nuevos casos a su proceso" y volver a encarcelar a su madre, la Lonko Juana Calfunao. Las sucesivas descompensaciones de Felipe Huenchullan y el allanamiento que sufrió la familia del vocero de los huelguistas de Angol, el werken Rodrigo Curipan, mientras el Gobierno los trataba de intransigentes.
Todo esto se suma a la invisibilización que se ha hecho de las 13 mil familias que quedarán sin sustento, si finalizan los empleos admnistrados por el Cuerpo Militar del Trabajo, CMT. Fueron milies quienes marcharon el 5 de octubre, la mayoría mujeres jefas de hogar, diciendo que estos son la única fuente de sobrevivencia para sus familias.
Las protestas vecinales contra la contaminación y la instalación de termoeléctricas son cada vez más masivas. El falso desarrollo que han anunciado las autoridades, se ha hecho a costo de la salud de familias completas y sin que se cumpla la eterna promesa de "más y mejores empleos". De hecho, la provincia de Arauco, Lota y Coronel, registran niveles de cesantía desoladores, que se han abultado en tanto la acción empresarial ha destruido sus fuentes de trabajo.
La pesca y la recolección de mariscos ha sucumbido frente a celulosa Arauco, la pesca industrial y la expulsión de desechos, por parte de la termoeléctrica en Coronel. La agricultura es cada vez más difícil, por la erosión y sequía que provoca la plantación forestal.
Estas son realidades que oculta el show que ha montado el Gobierno, usando principalmente a los mineros atrapados, que desde el 2003, a través de su sindicato, denunciaron las precarias condiciones de seguridad en que trabajaban. Lo que estaba en conocimiento del Ministro de Minería, pues el 30 de junio se reunieron con él y éste le contestó que a él le interesaba generar empleo y los problemas de seguridad eran entre la minera San Estaban y los trabajadores (un problema entre privados). Por supuesto, esto fue desmentido por Golborne.
La crueldad y la indignidad del show de los nuevos payasos que se han tomado el Estado es escandalosa, es deber de la comunidad detener esta aberración.