(Por Ariel Ríos/Resumen.cl) Lisboa es una de esas ciudades bellas para el cine, aunque ya tomada por la industria turística, en Lisboa el director danés Bille August, el mismo de la recordada "Pelle, el conquistador", nos presenta una historia de amor, dictadura y bellos paisajes lisboetas, más que apta para una tarde de verano sin la triste programación de la tele.
La historia que cuenta esta película se centra en un profesor de latín, Raimond (Jeremy Irons), quien salva del suicidio a una joven portuguesa en Berna, ella desaparece repentinamente, solo dejando un impermeable y un libro, el hombre queda intrigado y prendado a la vez, es así como decide tomar un tren a Lisboa y allí se desencadena una búsqueda que lo lleva a conocer rincones y personas que se presentan tan retraídas como imponentes en sus formas de vida.
Lo que Raimond descubre es que todo lo lleva a la época dictatorial del país luso, a los años previos a la Revolución de los claveles en 1974 , descubre que el autor del libro y los personajes que va encontrando tienen una historia de resistencia, represión y amores violentos propios de esos días intensos en que los portugueses intentaban sacudirse de esa dictadura de cuarenta y ocho años, la más larga de la historia contemporánea europea, en ese descubrimiento Lisboa es la protagonista y Raimond solo intenta entender
La película es entretenida, hay que seguir la hebra para desentrañar cuál es el misterio que explica a este grupo de resistentes que termina destrozado, destrozado no solo por una policía política que recuerda tanto a la CNI que da escalofríos pensar que eso fue una escuela muy bien aprendida por todo tipo de esbirros en cualquier país del mundo, también este grupo termina desintegrado por una historia oculta que se descubre solo hasta el final y que, de seguro, te sorprenderá.
La dictadura de Salazar, o Antonio de Oliveira Salaza, fue profundamente antimarxista y persiguió todo tipo de disenso que escapara a su catolicismo extremo y al corporativismo fascista que lo caracterizó, muy similar al franquismo español, aun así la cinta no es un alegato político, te informa y contextualiza, también explica los efectos del terror de estado en las historias de los personajes. Esta es una película clásica, amor que contiene un misterio, pero que mejor algo así para estos días de verano, un thriller que nos enseña algo de un país un tanto desconocido para los chilenos.
Tren de noche a Lisboa no es la mejor película del director danés, pero es un buen acercamiento a una historia que tiene un componente clásico y que a veces dan ganas de ver, dictadura e intrigas con elementos románticos, los diálogos son un tanto largos, pero pasan bastantes cosas para no aburrir, sin lugar a dudas te regalarás un buen momento y, así como de costado, aprenderás acerca de una de las dictaduras más infames del pasado reciente de Europa del sur.