Diversas organizaciones, movimientos sociales e individualidades penquistas se han organizado para conmemorar la Nakba (catástrofe en árabe).
Por Diego Chacano
"Esto es Gaza, una existencia amarga, en la que cada día nos acercamos más al borde del abismo. Nos enfrentamos diariamente al espectro de la muerte bajo el peso de un opresor injusto, un país inhumano y despiadado que nos aprieta el cuello - robando la inocencia y la alegría de nuestros hijos y el canto de los pájaros en nuestras ventanas". (Carta de Eman Ashraf Alhaj Ali, periodista palestina).
Cada 15 de mayo, desde hace más de siete décadas que se recuerda el comienzo del éxodo, del sufrimiento, de la persecución y del genocidio que ha ejercido Israel a la población árabe en suelo palestino. Esta vez, y de la mano de diversos movimientos sociales e individualidades, se ha realizado en Concepción una jornada de difusión, reflexión y una velatón en memoria de los palestinos desplazados y asesinados.
Diversos stands con información, gigantografías, música árabe e intervención visual (simulando cuerpos) se desplegaron en Barros Arana con Aníbal Pinto desde las 11:30 hasta las 18:30 hrs, que es cuando comenzó la misa en la parroquia El Sagrario (Caupolicán con O'Higgins) y la velatón frente a La Catedral.
"Señor, te pedimos por el personal médico que hace lo posible en salvar vidas entre el asedio israelí y las inhumanas situaciones que deben enfrentar en su labor como médicos. Escúchanos señor te rogamos"; rezaba la vocería de la colectividad árabe en Concepción.
Estas actividades solidarias nacieron de la mano de diversos movimientos sociales e individualidades locales que, convocados a través de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción, se han ido reuniendo para agrupar las fuerzas necesarias; una de ellas, el grupo autoconvocado Concepción por Palestina.
Marcelo Catepillan, vocal de Derechos Humanos de la FEC, explicó a RESUMEN: "Queremos hacer lo posible para que exista una sensibilización dentro del estudiantado (…) con la lucha que ha dado el pueblo palestino y además, una alerta frente a la amenaza que significan paises terroristas como Israel que están ejecutando un genocidio frente a otro pueblo".
En tanto, Gustavo Villanova exclama frente a la catedral: "Son los sionistas quienes instrumentalizan la religión judía con fines políticos partidistas. Son los sionistas quienes desprecian la vida humana cuando no se someten a los intereses imperialistas. Son los sionistas; los verdaderos antisemitas. No es una guerra. No empezó el 7 de Octubre. Es el estado genocida de Israel y la limpieza étnica de la población palestina que quedará en la historia como uno de los episodios más infames de la humanidad". Villanola fundó Conce x Palestina al notar que no existía aún una organización local para concientizar y solidarizar con el sufrimiento palestino.
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La Nakba
A partir del 7 de octubre del año pasado, Israel, bajo la excusa de una "contraofensiva" con el fin de derrotar los últimos bastiones de Hamas, ha asesinado a más de 35.500 civiles árabes; incluyendo 14.500 niños según cifras de la Organización Mundial de la Salud. Vale decir también que se ha destruido el 80% de la infraestructura comercial, el 73% de las escuelas y universidades y se ha restringido el 83% del servicio de agua potable.
Sin embargo, y tal como han ido visibilizando los movimientos penquistas en las diversas actividades, este éxodo no comenzó hace siete meses, sino hace 76 años con la nombrada Nakba; el primer despliegue de lo que sería una operación militar sanguinaria que no parece tener freno, cuyo nacimiento fue al día siguiente de creado el estado de Israel en 14 de mayo 1978. Gracias al Plan de Partición de Palestina, resuelto por la ONU a través de la Resolución 181.
Aquel mandato que partió una entonces Palestina administrada británicamente entre tierras para árabes y judíos, y que no contó con la ventaja militar de Israel ni las consecuencias para los palestinos desplazados. Hoy, a más de siete décadas de la Nakba, las nuevas generaciones solo conocen la guerra.
Lo que comenzó con la expulsión de 700.000 personas y la destrucción de entre 400 y 600 poblaciones, hoy es un cruento genocidio marcado en la historia de la humanidad.
Según el Ministerio de la Salud de Gaza (bajo administración israelí), la brecha en la cantidad de violencia y de destrucción, a la par de la cantidad de fallecidos, es gigantesca, y va aumentando preocupantemente a medida que avanza el tiempo.
A la fecha de hoy, y frente a los ojos del mundo, diversos estudiantes y colectivos se han movilizado para exigir a sus gobiernos una posición activa contra los actos que perpetúa Israel. Este es el caso de los campamentos en la Universidad de Guadalajara,
Granada, Sevilla, Pensilvania, Arizona o Chile; todas bajo consignas que buscan el término de relaciones diplomáticas y/o económicas con Israel. Muchas de estas movilizaciones han sido reprimidas. En América del Sur, solo Bolivia y Colombia se han posicionado contra el genocidio israelí terminando relaciones diplomáticas.