[resumen.cl] El día de hoy, 8 de noviembre, se cumplen dos años desde que Gustavo Gatica perdiera la visión producto del impacto de perdigones en sus ojos disparados por Carabineros en una manifestación en la Plaza de la Dignidad, uno de los casos más emblemáticos de violación a los derechos humanos durante el Estallido Social. Lejos de acercarse a conseguir justicia el policía, Claudio Crespo, cumple cautelar en su casa mientras una importante cantidad de manifestantes presos políticos continúa en prisión preventiva.
Gustavo Gatica, joven de 21 años, participaba de una de las tantas manifestaciones del Estallido Social en la Plaza de la Dignidad en Santiago, cuando recibió un disparo de perdigones por parte de Carabineros de Chile, transformándose en el caso más emblemático, junto a Fabiola Campillai, que representan a las más de 400 personas de lesiones oculares que se han registrado a lo largo del país a causa de las acciones de la policía uniformada.
La acción criminal fue perpetrada por Claudio Crespo, teniente coronel de la policía militarizada, quien en lo que representa un nuevo trato desigual por parte de los tribunales de justicia ante delitos cometidos por un agente del Estado, la Corte de Apelaciones de Santiago cambió la medida cautelar de prisión preventiva, pese a que permanece formalizado por dispararle en la cara a otro manifestante, eso sí, dos años antes del Estallido Social.
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Conocido popularmente como el «carnicero», Claudio Crespo, carabinero dado de baja por mutilar ambos ojos de Gustavo Gatica durante el Estallido Social, cuenta con un amplio prontuario de agresiones, las que echarían por tierra el argumento de «irreprochable conducta anterior», utilizado por la 5ta sala de la Corte de Apelaciones de Santiago para cambiar su prisión preventiva a arresto domiciliario y firma quincenal.
Además, aseguraron que Crespo no representa un peligro para la sociedad por haber sido dado de baja de Carabineros, pese a que el imputado por mutilar a Gatica mantiene otra investigación en contra por haberle disparado a la cara y a corta distancia a otro manifestante en 2018, durante manifestaciones en el marco del día del Joven Combatiente.