La determinación del tribunal se dio luego de un acuerdo alcanzado entre el Ministerio Público y la defensa del exsacerdote José Reinaldo Méndez Sánchez, quien reconoció los delitos imputados y contra quien pesaba una investigación iniciada en 2019, que incluye dos casos más de abuso sexual. 

A cinco años de libertad vigilada intensiva fue condenado José Méndez Sánchez, quien, siendo sacerdote de la Iglesia Católica, incurrió en un delito de connotación sexual contra un menor de edad integrante de la colectividad de la parroquia San Juan Bautista de Hualqui.

Fue el Juzgado de Garantía de Chiguayante que concluyó, al menos por ahora, el proceso judicial contra el otrora párroco de Hualqui, situación calificada como «satisfactoria» por el abogado querellante Cristopher Montecino Venegas, quien acotó que, «para optar a esta pena de libertad vigilada él tuvo que reconocer los hechos por los cuales se le había formalizado y que, por la condición particular de él (intachable conducta anterior) puede cumplir en libertad, una condena no menor de cinco años».

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El exsacerdote, José Méndez Sánchez, quien durante 2021 cumplió prisión preventiva en una casa de retiro de Tomé, fue condenado por los delitos de estupro y abuso sexual, ilícitos cometidos 2014 y 2017 cuando la víctima -de en ese entonces 14 años de edad- participaba de los preparativos para su primera comunión, voto de fe que tenía que validar ante el hoy condenado.

Además del querellante en esta condena, el exsacerdote cuenta con dos procesos judiciales más en contra; uno emprendido por un seminarista y otro por uno de sus acólitos. Al menos una de estas tres querellas llega a puerto, luego de más de nueve años de cometidas las agresiones sexuales y casi cinco de iniciada la investigación contra Méndez Sánchez.

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«Este fue un proceso de largo aliento, por lo que esto nos satisface, logramos cerrar una etapa importante en el aspecto judicial», expresó Cristopher Montesino Venegas. El abogado querellante también reparó en la demora del proceso judicial, el que indica, se entrampó en la región Metropolitana, pero que retomó fluidez en el Biobío, tras salir de la pandemia.

La parte querellante adelantó la posibilidad de recurrir a nuevas acciones judiciales, esta vez de carácter indemnizatorio contra el exsacerdote de la parroquia San Juan Bautista de Hualqui.