Mientras el hambre mata a niños de Gaza y francotiradores asesinan a sus padres en las filas de alimentos utilizadas por los israelíes como trampas mortales, donde más de mil palestinos han sido asesinados intentando obtener comida, este jueves las principales agencias de noticias internacionales pidieron la entrada de periodistas y alimentos a la franja de Gaza.
Las mayores y más antiguas agencias: la radiotelevisión británica BBC y tres grandes agencias de noticias internacionales, la estadounidense Associated Press (AP), la británico-canadiense Reuters y la francesa Agence France-Presse (AFP) han reclamado conjuntamente la entrada de la prensa a Gaza y han denunciado que el hambre amenaza a sus colaboradores.
Hay que recordar que Israel ha fijado a los medios de prensa como objetivos militares. Como en ningún conflicto armado en el mundo, más de 186 reporteros han sido asesinados por la fuerzas israelíes.
Hoy los periodistas que trabajan para medios extranjeros, al igual que la población de Gaza, enfrentan otro enemigo más allá de bombardeo aéreo, naval o de los tanques, el hambre.
La indignación a nivel mundial es tal que medios europeos, cuyos estados han sido cómplices del genocidio palestino han comenzado a estallar de indignación con portadas denunciando la brutal hambruna que sufre la población de Gaza.
El hambre como arma de guerra en el genocidio
La organización Médicos Sin Frontera (MSF) también alertó este jueves de que sus trabajadores en la Franja de Gaza deben salvar vidas mientras las suyas "se consumen lentamente" por el hambre.
La organización ha denunciado que la disponibilidad de alimentos "alcanza nuevos mínimos en toda la Franja", afectando en los pacientes y en el personal médico. Caroline Willemen, cabeza de MSF en Gaza informó que "la situación es más desesperada que nunca", muchos pacientes ya no reciben alimentos en los centros sanitarios, ni las maternidades ni salas pediátricas han podido dar alimento estos últimos días.
El personal médico en Gaza atiende a pacientes que se mueren de hambre, mientras ellos mismos sufren la falta de alimento. Israel ha utilizado la comida, el agua, la ayuda, como arma contra la población civil en esta guerra, violando todas las convenciones internacionales.