[resumen.cl] Luego que el ejército y policía boliviana le «aconsejara» renunciar a Evo Morales el 10 de noviembre de 2019, y tras una serie de postergaciones, finalmente el día de hoy se realiza la elección presidencial que tiene a Luis Arce Catacora del MAS como favorito en todas las encuestas, en un cuestionado proceso.

El 25 de octubre de 2019, Evo Morales era reelecto como presidente de Bolivia. Desde la Organización de Estados Americanos (OEA) y algunos gobiernos latinoamericanos cuestionaron el proceso y exigían la realización de una segunda vuelta, e incluso la repetición de la elección.

Días después, una auditoría realizada por la OEA señaló que los resultados no eran confiables, sin indicar en qué aspecto se habría producido el fraude y motivo por el que las Fuerzas Armadas y la policía realizaron un golpe de Estado en que derrocaron a Morales e instauraron a Jeanine Añez.

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Sin embargo, este informe realizado por el organismo con sede Washington fue cuestionado a mediados de este año por expertos de la Universidad de Pennsylvania y de Tulane que fue publicado en el New York Times, donde apuntan a que no existió tal fraude.

A un año de los acontecimientos, y con una administración de Añez marcada por el desastre del manejo de la pandemia y acciones autoritarias, hoy Bolivia vive un nuevo proceso electoral en un enrarecido y polarizado ambiente, donde observadores internacionales alegan trato diferenciado dependiendo el Estado de origen, por ejemplo, desde Argentina denuncian incluso la detención de uno los enviados por el gobierno de Alberto Fernández.

Asimismo, desde el Tribunal Electoral de la nación andina anunciaron la suspensión del conteo preliminar votos, por lo que habrá se deberá esperar para saber los resultados oficiales durante un par de días.

Aun así, los comicios llegan con Luis Arce Catacora del partido fundado por Morales, el Movimiento al Socialismo (MAS), y quien fuera ministro de Economía y Finanzas de Morales, como favorito en todas las encuestas para convertirse en el nuevo presidente de Bolivia , con alrededor del 44%, seguido del derechista expresidente Carlos mesa con el 34%.

Ante temor de un eventual fraude advertido por Arce y el mismo Evo Morales, organizaciones sociales anuncian defenderán la democracia en las calles.