La exposición, presente en galería Aura hace ya dos semanas, reúne distintas disciplinas artísticas y oficios, tales como la pintura y la fotografía respectivamente, abordando la contingencia desde a través de la obra La hierba que florece de noche. La iniciativa estará disponible hasta fines de septiembre en Concepción de forma gratuita.

Por Patsy Milena

"El desierto avanza", es una afirmación de Nietzsche que Gastón Soublette retoma y reflexiona. La afirmación refiere no sólo al desierto del territorio, a la pérdida de bosques, agua y ecosistemas que sucede y se acrecienta hoy en día en Chile y el mundo. Este desierto que avanza, avanza también en un plano espiritual, cuando nos despojamos de nuestras búsquedas sensibles de conocimiento, de las capacidades más nobles de creación y vinculación con el entorno social y natural que habitamos.

Cuando "no hay tiempo de ser humanos", cuando vivimos apremiados por satisfacer las necesidades básicas de subsistencia mes a mes, alejando nuestras acciones y proyectos de toda trascendencia, es cuando el desierto de nuestro espíritu peligrosa y destructivamente avanza.

Te puede interesar: ENGRUDO: El documental que aborda la explosión gráfica durante el Estallido Social

Paralelamente y como una forma de resistencia a este desierto, Gastón Soublette identifica que existe y cohabita un motor social de reparación, una "Hierba que florece de noche": pequeños, numerosos y significativos esfuerzos por aportar a mantener un estado de conciencia y sensibilidad activa como seres humanos, como pueblo, como comunidad.

En esta exposición, presente en la galería Aura hace ya dos semanas, Mariana, Paula, Catalina y Patsy, desde sus oficios -fotografía, instalación artística, arpilleras y pintura, respectivamente- abordan problemáticas contingentes aportando al imaginario y la memoria penquista, para contribuir al ejercicio colectivo de mitigar este desierto, de regar esta hierba que florece de noche.

Las artistas expositoras:

Catalina Larrere, parte de la exposición La hierba florece de noche, detalló que, «Las obras de mi colección buscan invitar a reflexionar como adultos nuestro actuar en una sociedad adultocentrista, porque para la mayoría de las personas la infancia es un chiste, el niño o niña chistosa, que debe portarse bien y en un futuro ganar dinero. Porque desde mi trinchera, me es necesario dar espacio a la infancia cuando no es escuchada ni observada.

Agregó que, «el mensaje está entre hilos, a través de arpilleras, el arte textil que narra mediante retazos de telas y bordados simples. La arpillera es tierna, hecha a mano en su totalidad, llama la atención por su «infantilismo» pero su mensaje, históricamente ha sido rudo, ha sido profundo y necesario. Lo mismo pasa con la infancia: detrás de la ternura está lo necesario de oír, observar y atender».

Título: "Bocamina I" Arpillera 37, 5 x 44 cm

Título: «La cigüeña de vuelta» Arpillera 37 x 50 cm

Por otra parte, Patsy Milena expresó que, «mi propuesta es una serie de estudios de pintura sobre papel en pequeño formato, resultado de salidas diarias de observación del paisaje donde vivo. También del paisaje que recuerdo, en el caso de "La península de Hualpén". Pintar es un ejercicio de conciencia, memoria e identidad para mí. Es una forma de conectar con los lugares y su gente a través del arte».

Oda al poléo Técnica mixta. Gouache y acuarela sobre papel. 15×21 cm

Estudios de laguna Huenuman I Gouache sobre papel. 15×21 cm

Desde la escultura, Paula Martínez Montt, explica que se trata de una, «serie escultórica que busca problematizar, visibilizar y cuestionar los efectos postindustriales en nuestro presente. Basada en la categorizada referencia al valor del suelo que realizan los informes del antiguo Instituto de Recursos Naturales (IREN), entidad que alude a tales tierras carentes de valor agrícola, ganadero o forestal, como "inútiles", "inservibles", "sin uso" o "vacío". Siendo de tal forma un paisaje afectado por la industrialización, que no solo ha extraído el material vivo de la tierra, sino que además ha afectado nuestra cultura, relaciones humanas y valores identitarios».

Acotó que, «haciendo un reconocimiento del territorio, tanto su patrimonio local e inmaterial, realizo un trabajo multidisciplinar, los principales componentes donde desenvuelvo la puesta en escena parten desde el cotidiano, utilizando materiales de orígenes industriales, desarrollándose en lenguajes que fluctúan entre la escultura, acción performática, instalación, fotografía y audiovisual».

Serie Espacios Vacíos Serie que por medio de la escultura - usando referencias fotográficas de Hualpén y una de Santiago - se basa en la categorizada referencia al valor del suelo que realizan los informes del antiguo Instituto de Recursos Naturales (IREN), entidad que alude a tales tierras carentes de valor agrícola, ganadero o forestal, como "inútiles", "inservibles", "sin uso" o "vacío".

Frutería La Esquina. Esculturas con relieve en negativo. Modelado en arcilla y vaciado en yeso. 27 cm x 27 cm x 7 cm. 2021.

Mariana Soledad,  fotógrafa, diseñadora de ambientes y técnico en ambientación y vitrinismo de Concepción nos expone registros que conforman un testimonio de hitos dónde, cómo fotógrafa, nos presenta realidades que muchas veces son interpretadas, erróneamente, como actos de violencia por los medios de comunicación en Chile. Estos acontecimientos corresponden a las protestas sociales ocurridas en las calles de Concepción entre el 2019 a 2022.

"Los momentos registrados son un testimonio de hitos donde, como fotógrafa, me interno en registrar estas realidades que en los medios son interpretadas como actos de violencia. Aprendo, desde la calle, el sentido de un pueblo que se manifiesta ante la injusticia y se hace cargo de cambiar la historia y derribar el legado de genocidas, violadores y dictadores, » detalla Mariana Soledad.

En este sentido, la fotógrafa ha hecho una investigación y recopilación profunda de lo que ha acontecido en las calles de Concepción en contextos como el estallido social del 2019. Esto ha permitido su desarrollo artístico y documental, entendiendo el sentido y sentir de un pueblo que se manifiesta ante las injusticias y se hace cargo de cambiar la historia.

En esta línea comenta que, "nunca he sido ajena a lo que pasa en el país, siempre he reflejado a través de la fotografía lo que sucede en las calles, lo que me atormenta como mujer y mi pensamiento crítico al sistema actual. Creo que es importante el trabajo fotográfico porque conlleva al registro histórico de un pueblo".

Fortaleza de mujeres 38cm x 31.5cm Papel fotografico de 250 gms El Manzano, Concepción

Desamparo 38cm x 31.5cm Papel fotografico de 250 gms Centro Concepción Octubre, 2019