Una nueva irregularidad asoma en la administración municipal de Talcahuano, comandada por Henry Campos (UDI). Ahora se trataría de falsificación de firmas, específicamente al interior de la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco). Este nuevo conflicto en la repartición porteña se suma a los pagos improcedentes, relativos al mejoramiento de gestión municipal, detectados por Contraloría en febrero pasado.

Por Juan Contreras Jara 

Por posible falsificación de firmas, la Contraloría Regional del Biobío abrió una investigación contra el municipio de Talcahuano. Las afectadas serían dos vecinas, parte de la Feria de Emprendedores/as Las Salinas, las que a través de los trámites para adquirir su personalidad jurídica, habrían sufrido la falsificación de sus firmas.

Concejales y concejalas de Talcahuano manifestaron su repudio a este nuevo evento irregular al interio del municipio comandado por Henry Campos y anunciaron que solicitarán a Contraloría investigar no solo lo sucedido con las vecinas de Las Salinas, si no que con todos los documentos al interior de la Dideco que puedan arrojar la misma irregularidad pero con otros vecinos y vecinas de la comuna.

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Según la notificación enviada por Contraloría al alcalde de Talcahuano, Henry Campos, esta daría cuenta por medio del relato de una de las afcetadas, que las falsificaciones de firmas habrían ocurrido durante noviembre de 2021 y tendrían como protagonistas a Rodrigo Ormeño y Mauricio Betancourt, ambos de la Dirección de Desarrollo Comunitario.

Claudia Millán, una de las vecinas afectadas con esta posible falisifcación de firmas, explicó a Resumen que, «fuimos a firmar en la mañana más de cuatro veces en el día y supuestamente había quedado todo ok. No había que firmar nada más. Pasaron 15 más menos y me habla don Mauricio Betancour diciendome que había que firmar un documento y fue a mi casa a las 21:00 de la noche. Reviso uno de los documentos que tenía que firmar y ya estaba firmado. Le pedí explicaciones y él me dice que quizás fue alguna de mis compañeras de la feria que fue a firmar y le digo que no, porque yo soy la secretaria. Me dijo que no sabía y se fue. Yo me quede con los papeles, no se los entregue».

Lo más grave vino después, cuando la vecina afectada se remitió a pedirle explicaciones de lo sucedido al ministro de fe del acta de constitución de feria de emprendedores/as Las Salinas, Rodrigo Ormeño.

«Me dice que sí. Me lo reconoció y me dijo que lo habían hecho solamente para que no volviéramos a firmar a la municipalidad, esa fue la excusa», declaró Claudia Millán. Al ser nuevamente consultada por esta situación, la vecina de Las Salinas reafirmó, «que me habían falsificado la firma. Mi firma y la de la presidenta».

Pero Ormeño no habría solo reconocido que falsificaron la firma de Millán, sino que también lo habrían hecho con otras y otros vecinos de Talcahuano. «Me reconoció que lo había hecho y que no era la primera vez», acotó la pobladora afectada.

Los reclamos al alcalde Henry Campos 

Luego de que el funcionario público de la Dideco, Rodrigo Ormeño, le reconociera a la pobladora porteña la falsificación de su firma, Millán envió una carta dirigida al alcalde Henry Campos (UDI), poniéndolo al tanto de la situación y exigiéndole tomar cartas en el asunto, pero hasta el día de hoy no le ha respondido la misiva.

Fue debido a esta inmovilidad por parte de Campos, que la pobladora debió recurrir a Contraloría, estampando una denuncia por falsificación de firma el 11 de febrero pasado.

Tras la inactividad de Campos y la postura conflictiva que asumió Rodrigo Ormeño con las pobladoras luego de que lo acusaran de falsificación de firma, «se atrasaron todos los documentos. Ahora estamos viendo la fecha para una reunión donde se elija nueva directiva, ver el tema del rol, etc». Lo anterior no impidió que las pobladoras trabajaran durante estos meses, pero sin los permisos que le podrían haber sido otorgados con la obtención de su personalidad jurídica, proceso detenido por esta posible falsifación de sus firmas.

Represalias por denunciar

Tras la denuncia en Contraloría, en la municipalidad de Talcahuano y el aviso que le dieron de lo sucedido las afectadas a los concejales y concejalas de la comuna, Claudia Millan relató que, «empezamos a tener problemas Mauricio Betancourt. Por ejemplo, una vez al mes hacemos una feria campesina y el 6 de marzo (domingo) nos tocaba nuestra 3a feria campesina. El viernes 4, él nos avisó que no íbamos a poder trabajar temprano porque él iba a vender permisos de circulación en la sede». 

Pese a que las vecinas enviaron la carta solicitando las inmediaciones de su sede comunitaria en Las Salinas el 16 de febrero y les habían otorgado los permisos, además de que las ferias campesinas son en conjunto con el municipio de Sta. Juana, por lo que implica a decenas de familias, se les dificultó la utilización del espacio hasta última hora.

Las vecinas, luego de poder realizar de igual forma su feria campesina, habrían recibido un llamado de Mauricio Betancourt, quien les comunicó que, «si seguíamos adelante con todo este tema, se nos iban a cerrar muchas puertas en la municipalidad», comentó Claudia Millán.

A raíz de este nuevo caso de irregularidades al interior del municipio de Talcahuano, las y los concejales, Daniel Gutiérrez, Valeria Vargas, Matías Coloma, Magali Saavedra y Victor Palomino, adelantaron que aparte de acompañar a la pobladora en las acciones judiciales que emprenda, solicitarán a Contraloría una revisión completa de la documentación en la Dideco. Lo anterior, considerando que los funcionarios le reconocieron a Millán que habían realizado la misma operación con las firmas de otros vecinos y vecinas.

Valeria Vargas, concejala porteña, enfatizó en que, «lamentamos que nuevamente el municipio se vea envuelto en estas situaciones y que, pero aun, perjudica a vecinas de la comuna. Todos los días estamos recibiendo denuncias de hechos irregulares y desde el municipio no se han tomado acciones para dar soluciones». 

Además, el grupo de concejales y concejalas exigió un sumario al interior de la Dideco, con la finalidad de agilizar la obtención de sanciones contra los funcionarios potencialmente inmiscuidos en esta posible falsificación de firmas. 

Por su parte, Claudia Millán se mostró indignada porque aún no recibe una respuesta desde el municipio en torno a la posible falsificación de su firma, haciendo énfasis en que, «a cuantas personas, a cuantos abuelitos le podrían haber hecho lo mismo». Con respecto a los funcionarios, la pobladora exigió que, «se vayan, hay que empezar a sacar a las manzanas podridas».

El 21 de febrero pasado, Contraloría notificó al alcalde Henry Campos (UDI) de la situación y le dio un plazo de 30 días hábiles para remitir todos los antecedentes del caso, para que el organismo realice la investigación correspondiente y ordene al municipio las sanciones que ameriten según la ley.