[resumen.cl] Esta es la segunda manifestación durante este noviembre en la que habitantes de Coronel muestran su descontento con la actividad termoeléctrica de Enel y Colbún. La población se encuentra preocupada ante reiterados hallazgos de metales pesados en estudiantes de liceos aledaños al sector industrial pesado de la comuna.

Los manifestantes marcharon desde el Mercado Municipal de Coronel hasta la plaza de armas de la comuna, exigiendo justicia por el largo historial de contaminación de distintas empresas en la comuna. El reciente hallazgo de 10 menores de la escuela Rosa Medel Aguilera del sector de Lo Rojas con trazas de arsénico y níquel en su organismo, generó aún más preocupación en la población, que exige más información y restricciones a las empresas que están acusadas de diseminar distintos contaminantes sobre la comuna, tales como aerosoles y metales pesados, que estarían afectando directamente la salud de la población.

La primera marcha fue convocada en el contexto de la conmemoración de los derechos de los niños, firmada el 20 de noviembre de 1989 y ratificada al año siguiente, en específico a respetar su artículo 32, que señala que las niñas y niños deben vivir en medio ambiente sin contaminación. Los manifestantes señalan que desde 2014 vienen denunciando la situación y que pretenden ir en escalada.

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En cuanto a las últimas pericias, «esperamos que no sea un símil de la muestra anterior, en las cuales fueron 18 niños que fueron dados de alta sin tratamiento, sin haber trabajado con toxicólogos», declaró en conversación con Resumen Omar González, presidente de los Trabajadores Unidos Contra el Asbesto (TUCA).

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Los dichos de González se refirieron a cuando en octubre de 2015, finalizada la toma de muestras de exámenes de sangre y orina a 288 niños de la comuna de Coronel, los resultados alertaron de 18 niños sobre valor de referencia en metales y que, posteriormente, la Seremi informó que habría comprobado que esta exposición sería transitoria y no crónica.

Algo que el propio Omar descarta al ser también víctima de la contaminación de las termoeléctricas, sintiendo las repercusiones en su sistema respiratorio ya que «los metales pesados se adhieren al organismo […] por eso mismo estoy pensionado».

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Por su parte, Alejandro Gutiérrez, integrante de la Red de Infancia de Coronel y del centro de acción social Protagoniza, organización que enfoca su quehacer en niños que trabajan, insistió en la necesidad de que el reconocimiento del derecho a un medio ambiente sano requiere de acciones concretas.

«Es un derecho que el Estado de Chile debe garantizar y en ese sentido creemos que está en deuda pues, como bien se mencionaba acá hoy, hay mucho desconocimiento, no sabemos lo que se está haciendo con los niños una vez que  fueron contaminados», denunció Alejandro.

«Estamos preocupados, no vemos que se vea movilización de la autoridad  regional, nacional, en temáticas como lo medio ambiental de Coronel», agregó.

De esta forma, los organizadores insistieron en la importancia de movilizar a Coronel pues «esta lucha tiene que levantarse», afirmó en representante de los TUCA. «Vamos a trabajar en función  e no parar […] aquí está claramente definido  quién dañó, independiente de que hayan otras empresas que dañen, aquí Endesa [actual Enel] mata hace años a la comuna», insistió González.