Cuando el victimario se convierte en víctima: Los antecedentes del Caso Cinthya

En Tomé

La legítima defensa es una causa de exención de la responsabilidad penal o atenuación de condena justificada que exime o reduce la sanción ante la realización de un acto generalmente prohibido. Para Cinthya, quién actuó en legítima defensa en contra de su abusador, la causa de exención aún no rinde sus frutos: su prisión preventiva se ha extendido por casi un año y se encuentra a la espera de un juicio, donde la parte querellante pide 20 años de cárcel efectiva por el delito de parricidio además de una indemnización millonaria a la familia.

Por Kathia Cancino Rojas / resumen.cl

RESUMEN se contactó con Libertad para Cinthya, un movimiento feminista que a través de Facebook informa respecto a la situación de la imputada, realizando campañas virtuales y físicas para visibilizar otro caso de violencia patriarcal dentro del país.

Como la colectiva lo explica, el caso de Cinthya posee un largo historial de violencia unidireccional hacia la mujer, que data desde hace 16 años atrás, ocurrido el hecho el primero de septiembre de 2019. Y es que pese a contactar múltiples veces a redes de apoyo externas y realizar denuncias a Carabineros, ninguna de estas alternativas funcionó, pues estos organismos también se configuran como "organismos patriarcales y violentos con las mujeres", declara la agrupación.

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Tal como explicitan a través de redes sociales, también las hijas de la actual imputada se vieron envueltas en el círculo de violencia, donde en "un contexto de nueva agresión, Cinthya decide defenderse y su agresor termina muerto", explican desde Libertad para Cinthya.

Y es que las involucradas tras el movimiento indican que el apoyo hacia la afectada nace tan pronto como se conoce su caso, sin embargo, ante la cercanía del juicio fechado para el 15 de octubre a las 8.30 horas en el Tribunal Penal de Concepción, se hizo imperativo realizar una campaña de apoyo que pretende difundir y visibilizar el caso.

Al respecto, señalan que: "Sabemos que el hecho de que una mujer se defienda constituye una afrenta a este modelo, pues es más esperable una mujer víctima, y es por ello que ponemos atención a estos casos porque el juicio puede transformarse en 'ejemplificador' para otras mujeres".

Es debido a ello que reconocen la violencia hacia las mujeres como un hecho constitutivo del patriarcado y no una mera consecuencia solucionable a través de las leyes del poder judicial chileno. Además, como colectiva creen que "ante la ineficacia de todas las instituciones, la autodefensa no puede ser considerada delito, pues nos encontramos ante el riesgo inminente de la vida de ella o su agresor", concluyen desde la agrupación Libertad para Cinthya.

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