[resumen.cl] Este viernes en la mañana, en la sede del Colegio Médico en Concepción se realizó un punto de prensa donde representantes de la entidad entregaron datos y antecedentes sobre violaciones a los derechos humanos por parte de personal policial y militar en este último mes de revueltas en la zona.
El neurólogo y miembro del Departamento de Derechos Humanos del Colegio Médico Mario Fuentealba realizó un llamado para «Que cese la represión de manera urgente en el país" agregando que esta represión ejercida por efectivos policiales «No son hechos aislados, sino que responden a un patrón sistemático para amedrentar a las personas que protestan y disminuir la movilización»
El profesional recordó que hay hasta ahora documentadas 5 personas asesinadas por agentes de Estado, 2.300 personas lesionadas, 1.400 por arma de fuego, 1.100 denuncias por torturas, y 70 denuncias por agresiones sexuales. Además agregó que por su parte, Carabineros menciona 1.600 heridos, asegurando que 105 estarían graves.
Fuentealba declaró que «El Estado de Chile ha ejercido una política sistemática de violación de los derechos humanos que no podemos permitir» recalcando que «En este momento hay 15 personas con heridas oculares graves en el Hospital Regional de Concepción y también hay personas heridas en servicios de salud de Talcahuano».
Carabineros ejerce una política de agresión directa a personal de salud que ejerce labor humanitaria.
Carabineros ha arremetido violentamente no solamente contra manifestantes, transeúntes y equipos de prensa sino también contra equipos de apoyo de salud.
Los efectivos de Carabineros buscan amedrentar a brigadistas de salud por el importante apoyo que prestan a manifestantes. Equipos de jóvenes de distintas casas de estudios han sufrido reiterados ataques deliberados en estas últimas semanas.
Por su parte, Catalina Fuentes, estudiante de medicina veterinaria UdeC y brigadista de salud denunció que «Hemos tenido que presenciar traumatismos severos, heridas graves, incrustación de perdigones, impactos de perdigones y balines, impactos de lacrimógenas, golpes de lacrimógenas e intoxicación por gases»
En el transcurso de este mes de protestas, los equipos de salud han recibido golpes, detenciones, torturas y violencia psicológica (insultos, faltas de respeto sobretodo a las mujeres) empujones con los escudos y lumazos en las piernas.
Por su parte, Matías Conejeros Cid, estudiante de Kinesiología de la Universidad Andrés Bello y presidente del Centro de Estudiantes de esa carrera señaló que el pasado martes 12 de noviembre fue detenido por carabineros mientras estaba en la brigada de salud prestando primeros auxilios. «Me tomaron detenido después de ayudar a una niña de 6 años intoxicada con lacrimógenas y ayudando a heridos con perdigones».
«Me tomaron detenido con el traje clínico y con las manos arriba, me reducen entre 4 carabineros y me golpean a un costado de la contraloría» señaló el joven que resultó con conmoción cerebral, esguince en el hombro y contusiones en todo el cuerpo. «Fui torturado con golpes en todo el cuerpo, nos pisoteaban en el suelo" denunció
Además denunció que recibió patadas en las costillas, en la cabeza, rodillazos, codazos, que le sacaron mechones de pelo, que caminaron sobre él, que le pisaron la cabeza, en el furgón policial les rociaron gas pimienta y les cerraron la puerta mientras estaban detenidos y esposados adentro. Al interior del vehículo policial le dio un shock anafiláctico a otro detenido que tuvo que ayudar.
Por este caso específico hay una querella apoyada por el INDH contra Carabineros por apremios ilegítimos.
El estudiante alega daño psicológico cuyo objetivo es que no presten ayuda humanitaria. "Me siento amedrentado y asustado". Así como a otros voluntarios, al joven lo están imputando por amenazas de muerte a Carabineros cuando alega que ni siquiera opuso resistencia a su detención.
«Ayudar a la gente es lo mínimo que podemos hacer» señala.