[resumen.cl] Una convocatoria a un nuevo ciclo de talleres de escritura ha realizado el colectivo Dramaturgia Clandestina. Su desarrollo, inicialmente radicado en Concepción, se ha expandido a otros lugares en virtud del formato virtual. Para esta instancia, están contemplados cuatro talleres y laboratorios que se desarrollarán entre enero y febrero del 2021: «Dramaturgias de lo cotidiano»; «Narrativas Virtuales»; «Poesía contingente»; y «Escribir y Documentar el presente». Finalmente se llevará a cabo un ciclo de publicación en línea titulado «Rebelar el presente». La inscripción tiene un costo de 30 mil pesos. Y mayor información se puede solicitar a través del correo [email protected] o por medio de su cuenta en Instagram.
Esta será la octava versión de la instancia, de la cual su director artístico, David Arancibia Urzúa, informa a Resumen que trabajarán cuatro talleristas: Carólina Jara Montecinos («Lorenza», «Neblina Nocturna»), Francisco Viveros, actor y poeta penquista, Vicente Larenas, dramaturgo y director de la compañía La Caldo con Enjundia, y David Arancibia Urzúa («'uke», «La muerte accidental de Sebastian Acevedo»). Explicando que "cada uno desarrolla su propia metodología y la vamos dialogando entre todos, porque entre nosotros también nos vamos nutriendo del aprendizaje del otro. Ahora, como sabemos, nos hemos tenido que modificar por la pandemia, y adaptarnos a la virtualidad, y hemos caído en un contrasentido, porque Dramaturgia Clandestina, cuando comenzamos, partió con la pregunta ¿Qué es lo clandestino hoy, en un mundo donde todo se dice y todo se ve? Ahora estamos adentro del «panóptico», somos uno más dentro de la «matrix», entonces las preguntas que nos hacemos son otras, que se relacionan mucho con todo lo que estamos viviendo desde la Revuelta o Revolución de Octubre y la actual pandemia".
Ante la pregunta respecto a qué representaría para sus participantes el taller de Dramaturgia Clandestina, David respondió: "Con el equipo de los talleres, nos hemos dado cuenta que el encierro ha provocado que mucha gente escriba. Y en la virtualidad han aumentado los talleres de escritura, por ejemplo, y las instancias de dramaturgia, también. Entonces nos hemos visto enfrentados a reflexionar sobre el ejercicio de escribir, más allá de los lenguajes y los géneros, y es por eso que ahora en esta versión queremos experimentar. Nosotros también hacemos parte de este aprendizaje, y nos hemos propuesto indagar desde la creación a modo de laboratorio, no desde lo formativo necesariamente, y al mismo tiempo, hacerlo más sencillo. En el fondo, queremos invitar a los participantes que escriban como quieran, y lo que quieran. En estos momentos, la escritura se ha vuelto un acto de resistencia. Y un acto catártico también. Por algo, durante el Estallido se decía que la poesía está en la calle. Ahora claro, estamos encerrados, y el sentido es otro además, pero en esencia por algo mucha gente está escribiendo".