El Servicio Nacional de Turismo, organismo dirigido en el Biobío por Natalia Villegas Castro, se pronunció conforme con la explotación minera en los cerros de Penco señalando que el lugar que se vería afectado no cuenta con valor turístico. Esto, pese a que desde hace años el espacio es utilizado por habitantes de la intercomuna para diversas actividades, cuenta con monumentos naturales y se ha promovido la creación de un parque comunal.

Por J. Arroyo Olea

Hace más de un mes la empresa minera Aclara ingresó oficialmente un nuevo Estudio de Impacto Ambiental mediante el cual pretende llevar a cabo la explotación de tierras raras en los cerros de Penco, con una inversión de US$130 millones y con la perspectiva de una explotación de 1.700 toneladas anuales de concentrado del mineral.

En este contexto, el Servicio de Evaluación Ambiental solicitó el pronunciamiento de diversos organismos «con competencia ambiental que, de conformidad a las normas vigentes, participan en el procedimiento de la evaluación de impacto ambiental».

La solicitud se realizó el 8 de mayo de este año, respondiendo a la fecha dos instituciones: Seremi de Minería y Servicio Nacional de Turismo (Sernatur). Respecto al primero, este anunció que «se excluye de participar de la calificación ambiental del proyecto», sin dar justificación alguna en el escrito ingresado al expediente de evaluación ambiental.

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Sin embargo, en el caso de Sernatur el organismo dio un respaldo al proyecto minero pronunciándose conforme con el Estudio de Impacto Ambiental. Entre sus argumentos, la institución encabezada por la directora Natalia Villegas Castro -quien firma el pronunciamiento- plantea que «el área del proyecto no presenta valor turístico y el carácter del paisaje y su valor se encuentran determinados por atributos de origen abiótico (relieve y suelo) y vegetación, no identificándose hallazgos relevantes en agua, en el entorno cercano al proyecto, o fauna, correspondiendo principalmente a un paisaje con baja singularidad y diversidad de elementos».

Asimismo, el documento caracteriza al lugar que se vería afectado por el proyecto «con un paisaje común para la zona y existe dominantemente una media y baja naturalidad debido a la actividad forestal y a la presencia de rutas y la autopista».

El pronunciamiento tanto de Seremi de Minería como de Sernatur se da previo a la visita en terreno programada para complementar los análisis que pudieran realizar las instituciones, hecho que ha sido cuestionado por organizaciones sociales debido no solo la rapidez con que se dio el visto bueno, sino también por la nula consideración de antecedentes relacionados al llamado «valor turístico» de la zona. Sobre este punto, desde Fundación Keule señalaron que «esperábamos, aunque sabemos que su obligación legal es solo materias legales sectoriales, que por lo menos se expresaran luego de la visita inspectiva a terreno».

Ejemplo de aquello es la caracterización de la zona que busca ser declarada como parque comunal, la cual se vería directamente afectada por la explotación minera. En este espacio, también se encuentran presentes especies declaradas como monumentos naturales -queule y pitao-, además de ser un lugar con valor cultural para las y los habitantes de Penco y la intercomuna, elementos que a criterio de organizaciones no fueron considerados en el análisis de la institución.