[resumen.cl] El grupo Laureate realizó en Estados Unidos una Oferta Pública Inicial de venta de acciones. Para avisar la inminencia del proceso, el dueño de la Compañía Douglas L. Becker, envió una carta a los inversores donde reconoció que la compañía es una empresa con fines de lucro, lo que causó revuelo en el país, puesto que el lucro con recursos de la educación superior no es permitido en Chile. El hecho viene a dejar nuevamente en medio del cuestionamiento no solo a la entidad, sino también al rol del MINEDUC y del gobierno al permitir el funcionamiento de este tipo de empresas que venden la educación como un bien de consumo.
El grupo Laureate, transnacional de la educación que controla más de 87 empresas de educación superior en 28 países, en Chile es controladora de las universidades Andrés Bello (UNAB), De Las Américas (UDLA), la de Viña del Mar (UVM), el instituto profesional AIEP, la escuela de negocios IEDE y la Escuela Moderna de Música. La empresa pretende abrir la venta de sus acciones a la bolsa de valores norteamericana, por lo que, para abrir el proceso, hizo llegar gran cantidad de información a la Securities and Exchange Commision (SEC) en EEUU, donde se incluyó la epístola de Becker en la que reconoce que Laureate es una empresa con fines de lucro.
"Durante mucho tiempo no teníamos una manera fácil de explicar la idea de que somos una empresa con fines de lucro, pero con el profundo compromiso de beneficiar a la sociedad (...) nuestra cultura combina la 'cabeza' de un negocio en crecimiento, eficiente y responsable, con el 'corazón' de una organización sin ánimos de lucro" señaló en una carta el magnate dueño de Laureate, en una información hecha pública por La Tercera.
Tras revelar la información el MINEDUC señaló que llamaría a una reunión con carácter de urgente para analizar la situación, debido a que la ley no permite el lucro con la educación superior. Sin rubor alguno, el gobierno plantea enterarse hoy del lucro en la UNAB, tras haber permitido su acreditación hasta el 2020, ser parte del sistema único de admisión y el transvasije de recursos públicos y de los bolsillos de las personas a través del CAE a la transnacional norteamericana.
Cabe recordar que los estudiantes de dicha casa de estudios se mantuvieron movilizaciones, que incluso llegaron a la toma de distintas sedes durante este año. Las razones de la movilización guardaban relación precisamente con el lucro que se adjudicaba a la empresa educativa. Dentro de los puntos demandados por parte de los estudiantes figuran demandas internas como reinversión de los recursos, mejoramiento de infraestructuras, planta docente, además de los petitorios por carrera de los 22 centro de estudiantes, apuntando centralmente a la rebaja de la matrícula y el congelamiento del arancel por año de ingreso.