[resumen.cl] Sin haber sido condenado por la justicia murió este viernes el psicólogo de la DINA, Hernán Tuane Escaff, el hombre tras las campañas de terror de la dictadura y presuntamente implicado en el crimen de Rodrigo Anfruns.
En completa impunidad murió a los 95 años el funcionario de la dictadura, Hernán Tuane Escaff, expulsado del Colegio de Psicólogos al ser sindicado como partícipe en graves violaciones a los derechos humanos.
Un documento publicado por el gremio en 2020 es apuntado como uno de los cerebros en las campañas del terror de la dictadura que buscaban generar «sentimientos traumáticos de angustia, neurosis, tragedia, peligro y miedo» en la población frente a una «amenaza marxista».
Además, Tuane Escaff figura con un rol clave en el caso Anfruns, uno de los crímenes de lesa humanidad más escandalosos de la dictadura y que involucra la desaparición de un niño de 6 años de edad y que apareció muerto en un sitio baldío contiguo al jardín de la casa de su abuela paterna en la comuna de Providencia, Región Metropolitana.
Crimen por el que se sindicó en primera instancia como responsable al adolescente de 16 años, Patricio Pincheira Villanueva, tratando de hacer pasar el caso como delincuencia común. Detrás de la confesión del joven estaba Hernán Tuane Escaff.
Finalmente, versiones periodísticas apuntan a que el crimen del menor se debía a una suerte de rencilla entre miembros de la CNI por negocios ilícitos relacionados con el tráfico de armas.
Hernán Tuane Escaff como funcionario del terrorismo de Estado
Tuane Escaff fue profesor de "Técnicas psicológicas de tratamiento" de la Escuela de Psicología de la Universidad de Chile, jefe del Departamento Criminológico de la PDI y es padre del opinólogo Ricardo Tuane, partícipe de un programa de ultraderecha conducido por el exhumorista «Checho Hiriane».
Trabajó en el encubrimiento del crimen de Rodrigo Anfrus y en la elaboración otros documentos cuyos originales fueron encontrados en una caja oculta en el subterráneo de La Moneda, caratulados como «Secretos», "Confidenciales» y «Reservados», de acuerdo a una investigación del periodista Jorge Escalante, publicada en «La Nación» el 7 de abril de 2002.
«Tras el golpe, Tuane trabajaba para el Departamento de Relaciones Humanas y Conducta Social dependiente del ministerio Secretaría General de Gobierno, donde diseñó una campaña que tenía por objetivo «manipular la mente de la población para mantener el miedo», como reza uno de los textos» consigna una publicación de El Mostrador.
"Creemos imprescindible reactualizar un programa de acción de guerra sicológica», cuya función era desatar los sentimientos traumáticos de angustia, neurosis, tragedia, peligro y miedo, añade otro documento.
Existen testimonios en cuanto a que habría aplicado pentotal sódico a los prisioneros para que éstos fueran interrogados por el Servicio de Investigaciones.
Tras su muerte, la Sexta Compañía de Bomberos de Santiago, emitió un homenaje a Tuane Escaff por haber sido parte de la entidad.