[resumen.cl] Un estudio recientemente publicado reportó un incremento en la mortalidad en la comunidad testeada con la variante o cepa B.1.17 del coronavirus SARS-CoV-2, también llamada, la cepa británica.
Cabe recordar que la variante B.1.1.7 fue detectada primero en Reino Unido en septiembre de 2020, siendo registrada en múltiples países alrededor del mundo.
Varios estudios han establecido que esta variante es más transmisible que las anteriores, pero no habían identificado si conducía a algún cambio en la severidad de la enfermedad
El presente estudio analizó un set de datos de una comunidad de 2.245.263 personas contagiadas y 17.452 personas fallecidas por COVID-19 en Inglaterra entre el 1 de septiembre de 2020 y el 14 de febrero de 2021.
El estudio fue publicado en la revista Nature y se encuentra disponible para su descarga gratuita
Te puede interesar| Francia, Alemania e Italia se suman a los países europeos que suspenden vacunación con AstraZeneca
Los resultados indicaron que para el 51% se pudo identificar la presencia o ausencia de B.1.1.7 debido a mutaciones en esta variante que impiden la amplificación por PCR de la diana del gen espiga o spike (la denominada «corona» del virus).
Con base en 4.945 muertes, el equipo investigador estimó que el riesgo de muerte asociado con esta variante es de 55% más alto.
Esto corresponde a un riesgo de muerte absoluto para el grupo de entre 55 a 69 años de edad en varones, con un incremento entre 0,6 a 0,9%.
El estudio indica que se estima en un 61% el mayor peligro de muerte asociada con la variante B.1.1.7
Por lo tanto, el estudio sugiere que la denominada cepa británica no solo es más contagiosa que las variantes predecesoras del SARS-CoV-2, sino que también causa una enfermedad más severa.
Vea el estudio completo aquí
Fotografía: El Comercio | Reuters