Según pericias preliminares, una falla en el arma de fuego pistola Bersa calibre .40 evitó se produjera un disparo que le habría quitado la vida a la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner. El atacante, un ciudadano brasileño identificado como Fernando Andres Sabag Montiel, se encuentra detenido.
Por Alejandro Baeza
Una intento de asesinato sufrió la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, la tarde de este jueves 1 de septiembre, cuando regresaba a su casa y saludaba a manifestantes. Fuentes del Ministerio de Seguridad del país trasandino, se trata de un hombre de 35 años de nacionalidad brasileña.
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El medio argentino Pagina/12 publicó que «Fernando Andres Sabag Montiel no logró dispararle a Cristina Kirchner porque estaba mal colocada la corredera de la pistola con la que trató de asesinarla. Así surge de los primeros datos sobre lo ocurrido.
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Tras la detención del hombre, se comprobó que el arma estaba cargada. Tenía 5 proyectiles pero Sabag Montiel no había hecho el movimiento necesario para alojar un proyectil en la recámara. Ese fue el motivo por el cual no pudo concretar el atentado contra CFK».
El ataque recibió el repudio transversal de todo el espectro político argentino, así como la condena de diversos mandatarios latinoamericanos.
Por su parte, el residente trasandino, Alberto Fernández, señaló en una cadena nacional que el atentado contra la vicepresidenta "merece el más enérgico repudio, de todos los sectores políticos, de todos los hombres y mujeres de la República".
El atacante
El hombre detenido por el magnicidio fallido es un ciudadano brasilero identificado como Fernando Andres Sabag Montiel, de 35 años, quien fue detenido y puesto a disposición de la justicia, quien fue inmediatamente reducido por adherentes a la exmandataria.
Según confirmaron a Página/12 «el arma tenía cinco proyectiles pero se encontraba mal la corredera, de acuerdo con una pericia preliminar. Por eso no habría hecho el movimiento hacia atrás y, como la bala no ingresó en la corredera, no salió cuando la pistola fue gatillada».
Según el citado medio de comunicación, Sapag Montiel está inscripto como dedicado al «servicio de transporte automotor urbano y suburbano no regular de pasajeros de oferta libre, excepto mediante taxis y remises, alquiler de autos con chofer y transporte escolar (incluye servicios urbanos especiales como charters, servicios contratados», lo que confirmaría la versión de que sería habitual conductor de una popular aplicación de transporte vehicular.