El viejo truco de pedir disculpas tras trapear el piso con los aludidos por la prensa, es una técnica más vieja que el hilo negro. Lo llamativo es que quien lo realizó es presidenta de uno de los partidos que encabezan la propia coalición gobernante.

Por J. Murieta

Faltó que dijera "Pero con respeto".

Natalia Piergentili se refirió en duros términos a los miembros del electorado del Gobierno de Gabriel Boric, pese a que su partido participa en el ejecutivo y la propia Ministra del Interior, Carolina Tohá, es una figura histórica de la tienda conducida por Piergentili.

"Si les quieres seguir hablando a los monos peludos, al 30% que tienes, a les compañeres, no creo que tengas ganas de hacer autocrítica. Sigues apapachando a ese sector con la agenda de identidad sexogenérica y todas esas leseras" señaló la mandamás del PPD a La Tercera. Llamativo, pues las declaraciones se dan en una entrevista donde habitualmente se filtra información del Palacio de la Moneda.

Las críticas de Piergentili se dieron al momento de analizar el resultado de las últimas elecciones del 7 de mayo y fueron así de duras pese a que su partido y la coalición que representó, que decidió ir en una lista separada a la del Gobierno, no obtuvo ningún escaño en el Consejo Constitucional.

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El contexto de las críticas parecen darse en una discusión interna en el bloque de gobierno que se debate por flotar en el ejecutivo mientras gobierna el Congreso o bien intentar llevar a cabo el programa. La primera postura la representaba fundamentalmente el PPD que hace meses busca que se renuncie al programa -en una nueva versión del "realismo sin renuncia" de Bachelet y el "en la medida de lo posible" de toda la transición- frente a una postura que salió fortalecida de las elecciones, pese al triunfo de la ultraderecha: el PC y el FA.

"Pido disculpas primero a los militantes de mi partido y por cierto a la comunidad LGTBIQ+, al Movilh y a todas las asociaciones de las diversidades sexuales, porque esa ha sido una causa de mi partido, porque yo en lo personal no creo que sean agendas que no importan" señaló durante la noche a Tolerancia Cero, tras arrojar la bomba de racimo.

Las palabras de la timonel del PPD resonaron por su forma, más que por su contenido.

Si bien apuntaban a criticar las agendas de minorías e identitarias de las nuevas izquierdas, que relegan las reivindicaciones sociales y económicas de la mayor parte del pueblo chileno a segundo plano, su legado partidario no tiene mucho que decir al respecto, ya que el pasado del PPD y su rol en la construcción del Chile de los 30 años dejó como herencia la enorme desigualdad económica que sufre el país, una de las causas estructurantes del malestar social chileno expresado en el estallido social y en los votos de castigo a la clase política.