[resumen.cl] Durante la jornada de ayer viernes, CONAF anunció el hallazgo de la especie Aegla concepcionensis, llamada «cangrejo tigre» endémica de Chile y que habita exclusivamente en la región del Bio-Bio. En el alarmante contexto de la pérdida de biodiversidad global, el estado de conservación de esta especie se considera crítico debido a pérdida o deterioro de los bosques nativos y los humedades a causa de los cambios de uso de suelo: expansión de monocultivos forestales, agrícolas y del negocio inmobiliario, entre otros factores.
Aegla concepcionensis (Schmitt, 1942) es un crustáceo decápodo de la familia Aeglidae. Los individuos del género Aegla habitan en ambientes de agua dulce del centro y sur de América del Sur pero se ha descrito que Aegla concepcionensis habita únicamente en la región del Bio-Bio, por lo que es considerada una especie emblemática. Este «cangrejo tigre» mide entre 2 a 3 centímetros, su dorso presenta un color que varía desde verde claro hasta pardo oscuro y sus patas presentan manchas transversales claras y oscuras, que dan origen a su nombre. Según señala el centro EULA de la Universidad de Concepción, se ha reportado la presencia de esta especie en puntos de la Provincia de Concepción, tales como el Río Nonguén, la Laguna Pineda y el estero Cárcamo, ubicado al interior de la Universidad de Concepción.
Según indicó CONAF en una declaración pública, el guardaparque de la Reserva Nacional Nonguén, Juan Iraira, encontró algunos individuos de esta especie durante sus recorridos habituales: "estábamos recorriendo el estero y vimos que tenía una característica distinta, con sus patas rayadas, más parecidas a un tigre y empezamos a buscar bibliografía sobre esta especie, que era muy poca. Lo encontramos en los esteros Rodolmo, Cumpumpuy, Lo Rojas y Nonguén" señaló.
Debido al riesgo de conservación en que se encuentra esta especie, el guardaparque advierte a los visitantes: "no ingresen al agua y cuando los vean en estos esteros, no tomarlos ni extraerlos. Está en una categoría de peligro de extinción y, por lo tanto, para nosotros es muy importante el hallazgo de esta especie ".
Por su parte, Ana Hinojosa, encargada regional de Biodiversidad de Conaf, señaló que el hallazgo de esta especie "es muy relevante porque es una especie endémica de la Región del Biobío, lo cual quiere decir que a nivel mundial solo se encuentra en esta zona. Está asociada a quebradas y a ríos rodeados de vegetación, principalmente nativa, como es el caso de esta unidad". Además, la profesional indicó que "ha sido muy poco estudiado, por lo tanto no es mucho lo que se sabe de ellos; solo se sabe que están asociados a cursos de agua, de corrientes tranquilas y relativamente altas también, en sedimentos arenosos. Es una especie omnívora y con un camuflaje bastante asociado al lugar donde se encuentra".
CONAF señala su intención de comenzar un monitoreo más amplio para aumentar el aún escaso conocimiento sobre esta especie, buscando generar alianzas con universidades y centros de investigación en la región del Bio-Bio.
Pérdida de biodiversidad en la Cordillera de la Costa de la región del Bio-Bio.
Cabe recordar que los bosques nativos en la zona central han sufrido una reducción drástica, a partir de su reemplazo por praderas y matorrales, áreas agrícolas y desde 1974, por plantaciones de monocultivos forestales. El estado de conservación del bosque nativo y esteros asociados en la cordillera de la costa de la región del Bio-Bio presenta un estado deplorable, principalmente debido la instauración del modelo de monocultivos forestales para la producción de pulpa de celulosa y papel. Gran parte de los bosques nativos que aún sobreviven en torno a la Cordillera de la costa en la Provincia de Concepción se mantienen únicamente en quebradas o zonas de difícil acceso para la maquinaria de empresas forestales. Mientras la masiva presencia de monocultivos de pino y eucalipto presenta un rápido crecimiento, su alto consumo de agua y recursos potencia la escasez hídrica en la zona.
Además, los humedales presentes en torno a la conurbación de Concepción, donde se encuentran además varias especies clasificadas como «en peligro de extinción», se encuentran amenazados por el deterioro de las cuencas, las alteraciones físicas y químicas en el agua, la introducción de especies exóticas e invasoras y la expansión urbana, principalmente a través del negocio inmobiliario que busca expandir la ciudad para aumentar sus utilidades, en detrimento de las necesidades reales de vivienda de la población.
Junto a esto, la interferencia antropogénica en el sistema climático de la biosfera, donde el negocio energético basado en combustibles fósiles y también en energías renovables que alimentan circuitos extractivistas es protagonista, amenaza seriamente la biodiversidad global y local. La pérdida progresiva de las condiciones climáticas y de disponibilidad de agua que requieren muchas especies para sobrevivir, puede acelerar los impactos directos de la reducción y modificación de su hábitat. Investigaciones recientes advierten que "Está previsto que el riesgo de una futura extinción global por el cambio climático, no sólo aumente sino que se acelere a medida que las temperaturas globales se incrementen".