[resumen.cl] Este sábado se realizó una jornada de homenaje póstumo a Fabián Troncoso Ovando, quien además de ser uno de los miembros fundadores de Resumen, fue también un activista político y cultural con dilatada trayectoria en la provincia de Concepción.
Durante la jornada llevada a cabo en la plaza Miguel Enríquez del barrio chorero de Las Salinas, se pintó un mural y se hizo un acto con cantores populares, quienes recordaron y homenajearon a Fabián. Los organizadores de la actividad explicaron que "se nos hace imposible no recordarlo en torno a la lucha social que realizó toda una generación de este país, para tener un presente y futuro mejor… Es imposible, porque gran parte de las energías y vitalidad de Fabián fueron entregadas de manera desinteresada a proyectos que buscaban la transformación social»
En plena Dictadura, en el barrio de Las Salinas, donde Fabían se crió, se realizaron persistentes acciones de resistencia, visibilizando la oposición al Régimen y buscando generar alternativas para sobrellevar la pobreza en que estaba sumida la población. "En ese contexto surgió el Centro Cultural Alerce, donde nuestro compañero Fabián fue parte fundamental… Siendo miembro de la generación de jóvenes alzados en lucha asumiendo la misma de tantos otros que ya habían caído en manos de los esbirros dictatoriales. Y así como tantos también, Fabián formó parte de quienes sufrieron la traición con la salida negociada hacia los gobiernos civiles y el posterior periodo de transacción política".
Puntualizan que "cuando hablamos de generación traicionada no hablamos solo del pasado. Traición es que a pesar del clamor popular por una educación gratuita, pública y de calidad, ésta siga siendo un bien transable en el mercado, mediante las castas empresariales delincuentes se enriquecen. Traición es morir esperando una salud gratuita, digna y oportuna. Traición es jubilar con 180 mil pesos y morir en la indigencia más absoluta".
Fabián siempre mostró esperanza en trasformar esta sociedad que quiso abandonar. Levantó grupos musicales como "Mestizo" y "Patria Grande", con diversidad de estilos y tocando diversos instrumentos. También realizó valiosos trabajos en diseño, pintura y serigrafía, técnicas en las que se había formado de manera autodidacta.
Finalmente los organizadores declararon que "reunirnos aquí es una forma de devolver todas las fuerzas a su profunda voz, con el canto de los que hoy cantan su nacimiento; de devolver a sus manos morenas la belleza de sus creaciones con las manos de quienes pintan hoy su historia; encontrarnos aquí cada año será demostrarle que seguimos resistiendo gracias a sus enseñanzas y que la vida que vivió valió la pena".