Las problemáticas al interior del INDH suman y siguen. A las ya públicas declaraciones de su director, Sergio Micco, sobre la inexistencia de prisión política en Chile y la arbitraria baja en las cifras de víctimas de daño ocular, situación que motivó la toma de la sede en Providencia por ya dos semanas, se le agregó el posible cierre de programas de ayuda psicosocial para víctimas de violencia estatal durante el Estallido Social.

Por Juan Contreras Jara

Pese a que habría recursos comprometidos hasta fines de agosto de este año, trabajadoras y trabajadores del INDH habrían recibido la instrucción de «cerrar procesos" y "cerrar casos" que involucran al Programa Institucional de Acompañamiento Psicosocial a Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos, según pudo constatar Interferencia.

Debido a esta razón, las y los funcionarios del INDH organizados en el sindicato Affindh, se encuentran en una paralización desde hace ya 10 días denunciando nulo acompañamiento a las víctimas de violación a los derechos humanos, además de precarización laboral.

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Con el cierre de programas, también se ejecutaría el término de la relación laboral de algunos funcionarios y funcionarias, quienes son normalmente contratados a plazo fijo de seis meses. A través de un comunicado, el INDH habría negado el cierre de dichos planes de acompañamiento, por lo que de la Affindh están solicitando información concreta al respecto, refutando que distintos profesionales ya habrían sido notificados de la decisión.

Las y los funcionarios del INDH hicieron hincapié en la informalidad de las respuestas entregadas por el organismo, que solo habría sido vía telefónica y sin mayor toma de compromisos. Según informó Interferencia, la dirección del Instituto habría comunicado su intención de extender los programas por lo menos hasta fin de año, pero ello no se ha regularizado de manera concreta.

Fotografía: ACES

La excusa de Sergio Micco (DC) se sustentaría en los paros efectuados tanto por las y los defensores de DD.HH. del INDH como por el funcionariado del mismo, situaciones que argumentarían según el director la falta de presupuesto o la postergación en su entrega.

Una vez más, Sergio Micco y la dirección del INDH responsabilizan a las y los trabajadores de irregularidades que dictan enormemente de la labor de acompañamiento que debe entregar a las víctimas de violación a los Derechos Humanos.

Hay que destacar que paralelo a las notificaciones de cierre de programas a psicólogos, asistentes sociales y otros profesionales del INDH por parte de su dirección, el Instituto habría abierto una licitación por 100 millones de pesos para contratar una empresa externa de comunicaciones.

Es decir, el INDH estaría dejando en el abandono a víctimas de violación a los DDHH al mismo tiempo que gasta recursos en imagen, estrategia y manejo de crisis.

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