[resumen.cl] El Poder Judicial ha difundido el retiro de la ministra de la Corte Suprema Rosa Egnem Saldías, luego de haber permanecido casi cincuenta años en diversas reparticiones. Lo hizo al cumplir el máximo de edad legal para permanecer en el cargo.

Antes de ser nombrada jueza del Juzgado de Letras de Santa Juana, región del Biobío, en agosto de 1974, y en junio de 1980 como secretaria del Décimo Noveno Juzgado Civil de Santiago, se había desempeñado desde junio de 1973 como secretaria del Juzgado de Letras de Yumbel y es precisamente sobre este periodo que existen denuncias de encubrimiento respecto a violaciones de derechos humanos. Rosa Egnem habría confesado en 1978 la omisión y manipulación de registros judiciales de la denominada Matanza de Laja y San Rosendo sin recibir sanción de la Corte de Apelaciones de Concepción, de acuerdo a la periodista Mónica González.

La Masacre de Laja – San Rosendo fue perpetrada por agentes del Estado que asesinaron a 19 trabajadores detenidos días después del Golpe de Estado de 1973. De acuerdo a los antecedentes recopilados por sus familias, la nómina con los nombres de cada uno de ellos, con la cual se guiaron los carabineros que les detuvieron, fue provista por empleados de la Papelera que aún opera en Laja y sigue siendo de propiedad de la familia Matte. Aún más, acusan que la empresa habría dispuesto el vehículo y el chofer para el traslado de los detenidos hasta el lugar en que fueron fusilados, así como les habría ofrecido el alcohol bebido por los efectivos policiales antes y después del crimen. El hallazgo temprano de los cuerpos obligó a los criminales a cambiarlos de lugar, conduciéndolos hasta el cementerio de Yumbel, donde fueron encontrados en 1979.

En agosto del año 2021, la Corte de Apelaciones de Concepción estableció condena para Pedro Jarpa Forester, un exempleado de la Papelera, en calidad de cómplice de los delitos de homicidio calificado y un aumento de penas para carabineros involucrados en la llamada Matanza de Laja – San Rosendo, en la cual fueron asesinados 19 trabajadores detenidos días después del Golpe de Estado de 1973. Pedro Jarpa Forester participó en el reconocimiento de trabajadores para luego someterlos a actos de lesa humanidad y ejecutarlos.

En una carta abierta fechada el 2017, dirigida al Ministro Carlos Aldana, quien sustanció la causa en primera instancia, Juan Acuña Barriga, hijo de uno de los obreros asesinados afirmó:

«Sr. Ministro, los familiares tenemos esperanzas, pero tememos que las instituciones del Estado sigan contaminadas por los códigos hipócritas de la dictadura. Egnem conocía la ubicación de los desaparecidos, pero la ocultó -según reconoció- para proteger su cargo de secretaria del juzgado de Yumbel. Dado el escándalo público y una vez cuestionado su alto cargo, a Egnem le pedimos una reunión privada. En la cita, se disculpó e hizo compromisos. Pero sus disculpas resultaron tan confiables como sus actos en la función de secretaria de juzgado, cuando ocultó la ubicación de los desaparecidos sólo para proteger su posición social, sin realizar ni una sola acción en nombre de la justicia a la que supuestamente sirve. Sus disculpas y sus promesas de entregar información al proceso, se esfumaron y, posteriormente, volvió a declarar que no tenía más antecedentes. Egnem en el ejercicio de funciones judiciales ocultó en una caja fuerte el parte policial que identificaba el lugar de la fosa común, sin temer a la Justicia ni reparar en principios, o tan sólo en el dolor de decenas de familias.

Ello prueba que no sirven de nada las simples disculpas por parte de los involucrados en crímenes contra la humanidad, materia tan trascendente para la salud del país. Lo demuestra la conducta de esta Ministra de Justicia que, apenas conseguido salir del escándalo, ha renegado de sus compromisos para con los deudos de los 19 asesinados, retomando con descaro su complicidad con los genocidas. La consecuencia de esto es fácil de advertir: Egnem, así como otros que se granjean el control de los poderes públicos, no dudarán en ejercer el mismo papel siniestro en el futuro. La Ministra Egnem mantiene los privilegios que han sido su prioridad, por sobre todo principio de humanidad o de justicia. Egnem y otros que poseen cuotas de poder actúan por causas ajenas al interés general. En definitiva, actos de este tipo relativizan las garantías jurídicas a quienes demandamos justicia. ¿Por qué Egnem no ha sido expulsada del Poder Judicial ni ha respondido por sus actos? Y también nos preguntamos: ¿Quién es responsable de que Egnem llegue a tan alto puesto de la Corte Suprema?

Señor Ministro, los que mandaron a torturar, ejecutar y desaparecer a mi padre en una de las matanzas masivas de la dictadura, fueron los mismos que, a pocos días del golpe de Estado, concurrieron a través de Ponce Lerou (ex yerno de Pinochet) al remate de los grandes fundos forestales de la zona a precios ridículamente bajos. Esto vino en provecho directo de los grupos económicos involucrados en la matanza, en especial de la forestal MININCO, propiedad de Roberto Izquierdo, quien, a su vez, fue «mano derecha» del grupo Matte y actualmente se encuentra entre los más ricos del país, presidiendo uno de los dos conglomerados (Angelini y Matte) que se adueñaron de la pesca en Chile y que depredan nuestro mar. ¿Qué duda cabe que aquí se encuentra uno de los móviles principales de estos crímenes contra la humanidad?»

Rosa Egnem integró la Corte Suprema desde noviembre de 2009 hasta este 11 de marzo. En el contexto del Estallido Social, cerca de Plaza Dignidad, un mural aludía a su figura con la leyenda: "encubridora de crímenes de la dictadura", ante lo cual la vocera del máximo tribunal, Gloria Ana Chevesich, contestó: «Esta Corte Suprema, como lo ha señalado en otras oportunidades, rechaza categóricamente las amenazas y actos de hostigamiento dirigidos en contra miembros del Poder Judicial», agregando que «los hechos que han dado origen a los actos a los que me refiero ya fueron investigados en un sumario administrativo que concluyó liberándola de toda responsabilidad, tal como se señaló en su oportunidad, en fecha 24 de agosto de 2015».