La movilización fue llevada adelante por trabajadoras, integrantes de la Federación Unión Sindical Biobío y la Federación de Sindicatos de Curanilahue, desde donde exigieron al Gobierno una mesa de trabajo que aborde la cesantía que padecen cientos de mujeres de la región, entre ellas, quienes perdieron sus casas y fuentes de trabajo producto de los últimos incendios forestales.
Por Juan Contreras Jara
Durante el mediodía de este lunes, decenas de trabajadores y trabajadoras cortaron el tránsito a la altura del puente Perales, en Talcahuano, para protestar, según sus declaraciones, contra el abandono en el que les tiene el Gobierno en relación al trabajo. Lo mismo hicieron sus pares de la Federación de Sindicatos de Curanilahue, quienes se movilizaron en Contulmo y Lebu.
La movilización coordinada tuvo como objetivo emplazar al subsecretario del Interior, Manuel Monsale, a la seremi del Trabajo en el Biobío y a representantes de la Subdere, Sence y el Fosis en la región, para establecer una mesa en conjunto y generar opciones dignas de empleo para cientos de mujeres cesantes de Lebu, Curanilahue, Contulmo, Talcahuano y Hualpén.
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En conversación con RESUMEN, el presidente de la Federación Unión Sindical Biobío, Vladimir Durán, explicó que, «muchas de ellas trabajaban en la pesca, haciendo aseo en viviendas o como comerciantes, además de todo lo que se produjo en la región con los incendios. Tenemos muchas compañeras de comunas como Santa Juana, que perdieron su vivienda y en ellas, muchas producían cosas y ahora están de brazos cruzados. Tratan de vender ropa en la feria, de hacer queques, de moverse para el pan del día a día».
Aspectos como la informalidad laboral, la inflación y la tasa de cesantía, que cerró 2022 con un 8%, han mermado las posibilidades de empleabilidad para estas trabajadoras, muchas de ellas, único sostén del hogar.
Ante esta situación y el profundo aumento en el costo de la vida que sufre la clase trabajadora en Chile, el dirigente sindical enfatizó en que, «estamos pidiendo un plan laboral a nivel regional, no mezquinamente solo para nosotros, sino en todas las comunas de la región que se han visto afectadas.
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Durante la protesta realizada en Talcahuano, comentan que «se nos dijo que venía gente de la seremi del Trabajo y esperamos, durante una hora, en el puente Perales, pero no llegó nadie, por lo que pedimos mayor compromiso con las trabajadoras y una audiencia con la delegada presidencial, para que gestione un encuentro con el subsecretario».
Sobre el emplazamiento al Gobierno y en especial a Monsalve, Durán hace hincapié en que, «él es de la región, por lo que debería conocer sus necesidades. Él es parte de la vicepresidencia del país, debe intervenir».
Son doce los sindicatos, provenientes de Hualpén y Talcahuano, que aglutinan también a trabajadoras de los programas pro empleo de dichas comunas, además de «los cesantes que, todos los días llegan en busca de una fuente laboral, con informes de asistentes social, con informe de OMIL que los envían a inscribirse y la respuesta es que no hay».
Desde la Federación Unión Sindical Biobío afirman que este es el puntapié inicial en la exigencia de puestos de trabajo para las mujeres cesantes de la región. Enfatizaron en que, «somos trabajadores que vivimos con el sueldo mínimo, que alcanza para 15 días y uno debe estirarlo por 30. La crítica no es solo al Gobierno, sino al Estado de Chile por su abandono».