Nos oponemos a una nueva hidroeléctrica en el Río Biobío, el caso de Rucalhue

[resumen.cl] En el río Biobío busca ser instalada una nueva central hidroeléctrica por una empresa eléctrica de propiedad estatal china. Sin embargo ha existido oposición de la comunidad que habita la zona. A continuación reproducimos una carta hecha llegar a nuestro medio por la agrupación de jóvenes Semillas del Lirken de la comuna de Quilaco, quienes manifiestan su postura y la historia detrás del proyecto hidroeléctrico Rucalhue.

El río Biobío ha sido ampliamente intervenido por el negocio hidroeléctrico, viniendo el nuevo proyecto a sumar una nueva intervención en el río más importante de la región. La empresa que está detrás se hizo mundialmente conocida por construir «Las tres Gargantas», planta de energía hidroeléctrica más grande del mundo, mientras que en Chile se está haciendo conocida debido a que pretende construir una central denominada Rucalhue en el Biobío.

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Río Biobío a la altura de donde se pretende instalar la hidroeléctrica Rucalhue

Por Organización de Jóvenes de Quilaco Semillas del Lirken de Rucalhue

Durante el año 2013 se hizo notar la empresa ATIAIA, quien en ese entonces eran dueños y propulsores del proyecto "pequeña central de paso" en Rucalhue. Fue así como, se venía a asentar el cuarto proyecto en la cuenca del río Bio bío, con personas que sonreían y se metían en nuestras casas para "conocer" a la comunidad. El encargado de las relaciones públicas de la empresa era Pablo Vidal, quien hoy es diputado por el distrito 8 de Santiago. Él hizo un trabajo minucioso, puerta a puerta, encargándose de inmiscuir en las vidas de la gente, analizando las debilidades y necesidades que tenían los vecinos y planeando la negociación para que la localidad "aceptara" este proyecto.

El programa de negociación constaba de cumplir alrededor de 13 compromisos con la localidad de Rucalhue, dentro de ellos: construir una sede comunitaria, mejoras en la escuela del pueblo, mejorar el balneario en compensación de la destrucción de "la junta", realizar proyectos para postularlos a fondos del estado, entre otros.

La subtel en ese tiempo tenía la responsabilidad de instalar una antena de celulares que sería solo para conectividad a internet, pero la empresa intervino para que fuera para llamadas e internet. Cuando comenzaron a notar que la gente del pueblo recibía todo lo que ellos decían como absoluta y única verdad, hicieron la jugada tramposa: dijeron que ayudarían con la señal y prometieron regalar "celulares", pero la condición para recibirlo era ser miembro o inscribirse en la Junta de Vecinos. La situación no solo quedó en eso, sino que también, niñxs desde los 14 años en adelante podían hacerlo. Hasta el día de hoy tenemos una mala y casi nula conectividad. Algo parecido sucedió con las negociaciones con las comunidades indígenas, a las que con financiamiento de nguillatún y compra de vestimentas tradicionales nos recordaban la llegada de los españoles regalando espejos cuando saquearon tierras a nuestros nativos originarios.

Como jóvenes del pueblo, nos oponemos a esta central por variados motivos:

1. Pablo Vidal fue un intruso que supo jugar con la buena voluntad de las personas de nuestra comunidad. Hoy tiene el discurso politiquero de defender la naturaleza cuando fue él uno de los responsables de la destrucción del río, hogar, lugares y ecosistemas que son parte de nuestra vida.

2. No comprendemos, con la cantidad de información que hay sobre destrucción del medio ambiente, que en la RCA no sea importante la destrucción del hábitat de un ecosistema de gaviotas, la pérdida de lugares milenarios importantes para la cultura que nos caracteriza, y como menciona el estudio realizado por el Centro de Ciencias Ambientales de la Universidad de Concepción (http://www.eula.cl/columna-generacion-de-energia-represas-y-biodiversidad-se-necesita-un-nuevo-paradigma/ ), este proyecto (y otros) viene a instalarse en los últimos espacios que "alberga a los pocos individuos que van quedando de peces nativos". Encontramos que el Estudio de Impacto Ambiental no cumple la función de conservación y/o protección de nuestros espacios naturales.

3. En ese tiempo habían muchos que se oponían a este proyecto, pero en calidad de menores de edad no tenía derecho de opinar en reuniones y toma de decisiones. Lo raro siempre fue que para opinar no teníamos edad, pero si con 14 años podíamos inscribirnos en una institución con el fin de recibir un celular.

Hasta el día de hoy, las autoridades locales se lavan las manos, diciendo que la empresa negoció directo con las comunidades y que ellos no tienen nada que ver. Nunca dieron información, apoyo o educación a la gente de lo que significaba un proyecto así. Nos dejaron en una jaula con leones, sin la oportunidad de oposición alguna.

La empresa ha desarrollado trabajos de sondaje durante la pandemia. No hicieron ningún tipo de notificación o aviso a las comunidades cercanas. Nos seguimos sintiendo pasados a llevar, sin tener la oportunidad ni el derecho a defendernos.

"No hay progreso que compense el daño que le causarán al río, a las gaviotas, a los peces, a la vida misma. Nos arrancan del corazón parte de nuestra historia".

Semillas del Lirken de Rucalhue (@sdl.rucalhue)
03/11/2020

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