En una acción incomprensible, el gobierno de Marruecos enterraría a las personas asesinadas el viernes pasado en Nador, frontera con la española ciudad de Melilla. Esta información emanó de diversas ONG, que aseveran que las autoridades marroquíes están excavando 21 fosas para sepultar a los más de 30 migrantes fallecidos tras intentar pasar la valla fronteriza.

Adrián Ríos Pincheira

La Asociación Marroquí de Derechos Humanos comunicó que, «los temores suscitados resultaron ser reales: esta mañana, las autoridades de Nador preparan 21 fosas en el cementerio de Sidi Salem para enterrar a los inmigrantes fallecidos el viernes», la organización continúa señalando que «Sin investigación sin autopsia sin identificación, las autoridades buscan ocultar el desastre. Un verdadero escándalo».

La Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) publicó en la red social facebook una fotografía donde se ve a trabajadores excavando fosas, afirmando que allí se sepultará a los migrantes subsaharianos asesinados, según informa Europa Press.

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Por otra parte, diversas fuentes de seguridad confirman que sería en Nador donde se enterrará a los migrantes asesinados, y si bien no se conoce la fecha de la sepultación masiva, comentan que se deben completar trámites judiciales antes de ello. Las sepulturas planificadas se ubican en una zona alejada del resto de tumbas, allí ya hay 21 fosas, la mitad excavadas anteriormente y la otra mitad hechas este domingo. Los operarios encargados de las excavaciones continuarán mañana con su tarea.

Recordemos que el intento de alrededor de 2.000 personas para acceder a Melilla, ha sido el más numeroso registrado en los últimos años, y que se terminó con 23 emigrantes muertos, según las autoridades marroquíes, además de una decena de heridos, 18 de ellos ingresados en hospitales.

Ahora bien, organizaciones humanitarias señalan que el número de muertos sería mayor. Por otra parte, Marruecos no ha informado de las nacionalidades de los fallecidos ni del proceso para sepultarlos.

En un comunicado conjunto, diez organizaciones humanitarias -marroquíes y españolas- solicitan al gobierno marroquí que identifique y devuelva los restos de las víctimas a sus familias.