En el tercer capítulo de Conversaciones Eco-Constituyentes: un programa sobre desafíos socioambientales dialogamos con Oscar Campanini, investigador social del CEDIB, acerca de la Constitución boliviana y la lucha por el agua.
Por Angeles Arriagada | Transcripción de entrevista realizada por el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA) y RESUMEN
Oscar Campanini Gonzáles es investigador social, experto en agua y extractivismo, ha escrito en diversos medios y revistas académicas, destacando la crítica al extractivismo minero y la política del agua en Bolivia; además ha reflexionado sobre los movimientos sociales urbanos y rurales, como también sobre la vulneración de derechos humanos en el contexto de conflictos socioambientales. También ha investigado en relación a la Constitución boliviana y el rol del proceso constituyente en torno a temas ambientales. De igual forma, es parte del Centro de Documentación e Información de Bolivia (CEDIB), organización civil sin ánimo de lucro, que brinda desde 1970 servicios de información y consulta documental sobre temáticas sociales de Bolivia y América Latina, desde una mirada crítica.
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Nos enteramos hace tres días atrás de que el agua está siendo cotizada en Wall Street. Jamás pensamos que íbamos a estar viviendo algo así. Ustedes en Bolivia protagonizaron hace no tanto tiempo atrás, hace cómo 20 años, una guerra por el agua, popular, entonces queríamos preguntarte a ti ¿Qué está pasando Oscar, con eso?
Sobre esta cotización del agua en la bolsa de Chicago, es realmente algo que debe llamarnos la atención, genera sorpresas y en alguna medida debe preocuparnos a todo el mundo, que es lo que ha ocurrido exactamente. Ir conociendo para poder saber y reaccionar de forma más adecuada, ahí si ustedes en Chile tienen más conocimiento, más información y lamentablemente más experiencia en lo que significa mercados de derechos de agua.
Chile es uno de los pocos países en el mundo en el cual existen mercados de derechos de agua como principal mecanismo para distribuir el agua, pero no es el único país, de nuevo, Estados Unidos y varios Estados tienen el mecanismo de gestión del agua, en el que personas, organizaciones, empresas pueden tener propiedad sobre determinado derecho de agua y con ese derecho, esa propiedad, pueden realizar transacciones, pueden vender ese derecho de agua; hay organizaciones, empresas, ciudades, agricultores que tienen que también comprar esos derechos de agua para poder usarlos; entonces esa forma de gestión también existe en Estados Unidos desde hace varias décadas atrás, pero lo que ha ocurrido es que ahora se han animado a que este mercado de alguna forma cotice en esta bolsa de Chicago; y qué es lo que hace esta bolsa de Chicago, lo que hace es ofrecer contratos futuros de materias primas. En términos rígidos, y hasta en términos un poco más teóricos, las diferentes empresas necesitan materias primas y para asegurar esas materias primas, muchas de las cuales varían mucho en precio, lo que hacen es comprarlas por adelantado, esto se llaman los contratos futuros y eso se hace en bolsa; esos son los argumentos técnicos, teóricos de las empresas, pero la realidad es mucho más que eso, lo que ocurre con estos mercados de materias primas, de contratos futuros de materias primas es que se empieza a especular. Muchas de estas materias primas pueden ser muy importantes y generar mucho dinero, entonces por ejemplo con los hidrocarburos, sea este petróleo, sea gas, es un mercado importantísimo de estos commodities o materias primas, y ya hemos visto que a veces el problema de esto es que estas transacciones o estos negocios que se pueden hacer con contratos futuros, pueden ser especulativos y pueden disociarse de alguna forma de la compra y venta real, entonces vamos a observar que estas transacciones o estos negocios especulativos pueden tener impacto sobre los mercados reales, de alguna forma con el petróleo ha ocurrido algo parecido en algún momento. Hace unos meses atrás, el petróleo llegó hasta precios negativos; eso es algo complejo de entender, es como si, en lugar de que valga un centavo, en realidad tengan que pagarme para que yo pueda comprar petróleo, pero es más o menos así, entonces los que nos debe preocupar es que en el caso de California concretamente ya se este empezando a cotizar.
Entonces California funciona así, no conozco con mucho detalle cuales sean los problemas de California, así como no conozco con mucho detalle los problemas que enfrenta Chile por la forma de gestión que tienen del agua como propiedad privada, pero si es algo que nos debe preocupar que ya el agua empiece a entrar en este mercado en el que el negocio especulativo puede ser el más importante, entonces la mercantilización del agua en su máxima expresión es esa, y eso es algo que está ocurriendo.
¿Cómo ha sido la caracterización de la lucha por el agua en el caso concreto de Bolivia y cómo este desarrollo se logró materializar en la nueva Constitución del país?
El proceso constituyente boliviano y en lo concreto en lo relacionado con el tema del agua es importante de entender como un proceso histórico, como un proceso de diferentes luchas y procesos reivindicativos de sectores sociales respecto al agua. Uno de ellos sin lugar a dudas es la guerra por el agua, la lucha contra la privatización y concretamente esta forma de gestionar el agua, que tiene mucha similitud con lo que es ahora Chile, que son las concesiones, concesiones de agua que pueden ser adquiridas por cualquier entidad privada y también pueden ser transadas. Eso se quiso implementar en Bolivia desde el año 1997, concretamente se empezó a implementar en la ciudad de La Paz y el Alto, una empresa privada que es Aguas del Illimani y ahí concretamente la empresa privada era Suez, la que consiguió las concesiones de la ciudad La Paz y el Alto. Empezó a administrar los servicios para esta ciudad y tuvo sus consecuencias esta administración del servicio. Ellos siempre mostraban números positivos, una gestión más eficiente, pero en los hechos, después de varios años; concretamente alrededor del 2002, en Bolivia se dieron cuenta, especialmente en la ciudad de el Alto, que en muchos sectores de la población más pobres no lograron acceder a este servicio, en muchos casos porque era muy caro o porque los costos de conexión se hacían simplemente inviables.
Entonces un importante sector, y especialmente el más desfavorecido, no tenía acceso a servicios de agua potable o de alcantarillado. Esto también ocurrió en la ciudad de Cochabamba, pero con más intensidad. En Cochabamba, Aguas de Tunari se llamaba la empresa transnacional estadounidense Bechtel; hizo lo mismo, pero hizo un proceso más acelerado de ajustes y eso se transformó en un incremento tarifario de, en algunos casos, hasta el 300 %. Entonces, obviamente, esos cambios fueron más intensos, más radicales y generaron también una reacción social más rápida y más intensa, que llevó a que la población se movilice, el conjunto de la población rural, urbana y finalmente esa movilización termine sacando a esta empresa. Entonces ahí hay una lucha, un proceso concreto de defensa del agua cómo bien público, de una protesta en contra este régimen de concesiones, que lo que hacía era concentrar el control del agua para una empresa e imaginar finalmente a este bien, a muchas personas que no tenían recursos suficientes. Pero esta no es la única lucha, hay varias otras luchas en Bolivia que también han juntado y de alguna forma han llevado a que finalmente que en la constituyente se planteen una serie de artículos y transformaciones.
¿Cuál ha sido el rol que han cumplido las organizaciones territoriales en Bolivia en la lucha por el agua, pero también en el proceso constituyente, sobre todo con el tema del agua que es lo que nos convoca?
El proceso constituyente en Bolivia ha tenido como protagonistas totales, yo diría, completo, a las organizaciones sociales. Eso ha sido muy interesante, realmente ha sido muy rico y más todavía ha sido un privilegio para algunas personas, entre las cuales me incluyo, el poder observar, vivirlo de cerca en persona y durante mucho tiempo, en el proceso constituyente boliviano; yo puedo afirmar que, que con cierta fortuna, todo el conocimiento y toda la tradición, normativa, de derecho, todos los abogados, especialistas no tuvieron un rol protagónico. En los partidos políticos, que constantemente desde la posición ideológica planteaban alternativas, planteaban promesas, planteaban modelos, tampoco tuvieron un rol protagónico. Me animo a decir, que el propio Movimiento Al Socialismo, que estaba en gestión de Gobierno en ese tiempo, tampoco tuvo un rol protagónico en la Asamblea Constituyente. Fueron las organizaciones sociales las que tuvieron ese rol protagónico, tal vez ese sea importante marcarlo como una lección también, diferentes sectores sociales, de la sociedad civil a partir de su experiencia, a partir de sus indicaciones, empezaron a generar procesos de construcción de propuestas desde mucho antes, de que se instale en la Asamblea Constituyente y obviamente en el momento de instalada, hicieron una importante incidencia y presencia durante la Asamblea Constituyente para qué esas propuestas sean consideradas, sean discutidas, debatidas y finalmente incluidas en el texto constitucional y ocurrió aquello, fue un proceso muy rico, muy interesante, en como diferentes sectores de la sociedad civil lograron articularse, juntarse, armar una propuesta conjunta, plantearla a la asamblea constituyente y durante la asamblea constituyente, hacer un trabajo permanente con las diferentes comisiones para reflexionar, para tratar esa propuesta y para incluirla y es así, gran parte del texto constituyente es reflejo de una articulación que se llamaba en ese entonces el Pacto de Unidad, entonces creo yo, en el caso boliviano, hemos tenido la fortuna de tener ese altísimo protagonismo, recuerdo incluso que llegaron diferentes tipos de especialistas internacionales, en tema normativo, en tema constitucional y de todo tipo, desde especialistas de izquierda, especialistas de derecha, especialistas en materia penal, en temas de recursos naturales, especialistas en autonomía incluso, pero todos ellos no podían dar respuestas certeras o comprender siquiera muchas de las discusiones y desafíos, que vivían y planteaban muchas organizaciones sociales en sus propuestas, entonces hasta estos especialistas quedaron de alguna forma marginados de esas discusiones y sí fue un proceso en el que hubo mucha riqueza y protagonismo de las organizaciones sociales, hay nuevamente otro tema para apuntarlo como lección, para el proceso chileno, ese proceso de protagonismo tuvo un límite, tuvo un obstáculo y tuvo un fin, ya en el momento de aprobación de la asamblea constituyente, habían diferentes etapas, una etapa importante era la de aprobación en comisiones, posteriormente del cuerpo completo de la asamblea constituyente, una aprobación en grande, una aprobación en detalle, en esas últimas etapas es donde los partidos políticos principalmente, y el propio gobierno en sí, retomaron de alguna forma ese rol protagónico y realizaron unos últimos ajustes, el texto aprobado en grande difiere mucho del texto finalmente aprobado; hubo un paso importante de aprobación en detalle donde se hicieron modificaciones preocupantes, pocas, pero realmente que afectaron consistentemente algunos temas, que sí eran muy interesantes planteados desde las organizaciones sociales y después algo muy particular qué ocurrió en Bolivia, es que hubo otro proceso de ajuste o de corrección de estilo le llaman, pero pasó los límites de esa denominada corrección de estilo y hubieron varios ajustes concertados con los partidos políticos y que finalmente se concertaron y se aprobaron en la asamblea legislativa y no así en la asamblea constituyente, entonces ahí sí no hubo rol alguno de las organizaciones sociales, sí hubo algún rol protagónico de alguna organización social, fue por ejemplo el caso de Bolivia, fue el caso de los cooperativistas mineros, el momento de aprobación de la constituyente, fue un momento muy tenso en términos políticos, con grupos de poder, grupos económicos que estaban realmente generando mucha tensión, entonces llegaron hasta trasladar la aprobación a otra ciudad, porque no había condiciones de aprobarla en la ciudad de Sucre, que es donde se realiza la asamblea constituyente, entonces la aprobación detalle se realizó en la ciudad de Oruro y hubo resguardo físico, no de las policías, no de los militares, sino que de los cooperativistas mineros, para poder defender el texto constitucional, eso no fue gratuito, tuvo como un "costó", una modificación a un artículo transitorio en la constitución política del estado en favor del sector cooperativista minero, que posteriormente sirve para sostener toda la ley minera aprobada cinco años después y que no solamente beneficia al sector cooperativista, sino beneficia al conjunto del sector minero, eso para poner un ejemplo y siguientes modificaciones con los partidos, las concertaciones, modificación de concertaciones con los partidos políticos en asamblea legislativa y en la ciudad de La Paz también tienen importantes consecuencias y similares consecuencias, entonces otros temas para apuntar como lección para Chile.
¿Qué límite ustedes han podido colocar en Bolivia dentro del marco del proceso constituyente para igual ir frenando este proceso del avance extractivista cómo una política económica en el país?
Hay caracterizaciones, hay principios muy importantes en la Constitución boliviana, que tenían la pretensión justamente de establecer esos límites para las actividades extractivas, entre ellas está sin lugar a dudas el tema del agua como derecho humano, es un principio que sí está establecido en la Constitución boliviana, hay hasta, es un poco particular la historia, pero hay hasta la formulación del agua como un derecho fundamentalísimo para la vida, esta idea de fundamentalísimo no es algo que se rige por criterios normativos internacionales, lo que intenta es remarcar aún más, o sea, es un derecho fundamental pero es uno de los más importantes de los derechos fundamentales, aunque en derechos humanos, por supuesto que no es viable ni factible hacer esa jerarquización de derechos, pero hay esa formulación en la Constitución boliviana para remarcar de alguna manera la importancia del agua, respecto a la privatización y al régimen de concesiones como una vía para esta privatización del agua existe hasta la formulación negativa que es algo que también es muy poco común en las constituciones, el formular algo de forma negativa pero sí insistimos y sí se puso así en la Constitución boliviana de que el agua no será gestionado, no será sujeto de privatización ni será gestionado por un régimen de concesiones, entonces esa formulación negativa también de alguna forma está como muestra y como señal de un límite y de una vía de como se quiere cerrar por completo para el futuro en Bolivia. Está también el tema de usos y costumbres, en Bolivia toda la tradición, toda la fuerza de las organizaciones sociales, de estos sectores que pelearon el tema del agua, iba muy de la mano con la defensa de la forma en la que gestionaban las comunidades, los pueblos indígenas, ese término que se denominaba Usos y Costumbres o derechos constitudinarios, entonces estas organizaciones fueron algunas de las más importantes y ese principio o esa idea está plasmada en la Constitución política del Estado, la protección de fuentes de agua es de igual manera un criterio, un principio importante que está plasmado, otra de las importantísimas luchas sociales en Bolivia para transformar las políticas y las formas de gestión del agua, fue la idea de participación social, desde diferentes sectores y en diferentes normas, en diferentes procesos se fue reivindicando la participación social en la gestión de agua y una participación efectiva, no solamente a través de partidos políticos o de representantes, entonces esa idea, ese principio también están plasmado en la Constitución boliviana y algo que no está en la Constitución boliviana y que es muy importante que; igual, lección para Chile; que lo consideren es este tema de los derechos de la naturaleza; a pesar de que es algo que sí se hizo en Ecuador, en Ecuador fue una de las importantes experiencias que sí tuvo algún grado de influencia en Bolivia, la cual sí vimos mucho, desafortunadamente no seguimos los pasos, entonces la idea de los derechos de la naturaleza no están plasmada en la constitución boliviana, pero sí hay esta idea del agua para la vida, que de alguna forma, es más allá como una concepción de la importancia del agua más allá del ser humano, entonces hace una relación con lo que es agua y vida, independiente de qué sea este sea un ser humano o otro ser vivo, entonces hay esa serie de principios, también hay otros principios que no consideró en Bolivia y qué es importante que puedan considerar en Bolivia, es toda esta reflexión del agua como bien común, toda esta idea del bien común, es algo que sí, fue muy activo, fue muy importante en las movilizaciones en Bolivia en la Guerra del Agua en particular, fue una reflexión aportada por todos los cochabambinos y con una vivencia muy, muy rica, pero que no fue recuperada en términos, en la formulación del texto constitucional, eso para dar algunas pautas pero creo que la pauta más importante es que los límites que estén establecidos; y algo más, el tema de la soberanía, el tema de la soberanía es algo que sí está plasmado, que la gestión del agua siempre considere la soberanía nacional, pero bueno, además de estos principios, creo que algo importante que deben consideran en que la Constitución, es una de las principales normas, pero es un texto, entonces mientras no le demos la fuerza que debe tener ese texto como muchas otras normas que seguramente existen en otros países, que tienen ideas, principios positivos e interesantes, no se va a aplicar, no. Entonces creo que el más importante límite que se puede establecer en los procesos constituyentes, igual, lección para Chile, es mantener la fuerza social, es mantener esa fuerza social propositiva, es reivindicativa, que no necesariamente se sujete a los poderes, al control del Estado o a todos los espacios de poder que pueda tener y que se mantenga viva, activa y fuerte; ese es uno de los más grandes problemas, creo yo, que tuvimos en Bolivia, qué hace que muchos de los problemas que existían antes de la constituyente, sigan vigentes ahora, a pesar de los límites que tenemos en nuestra Constitución.
¿Cómo evalúas tú, desde el escenario regional lo que ha pasado en los países de Sudamérica?,¿Cómo evalúas tú el proceso constituyente chileno?, ¿Cuáles son estas claves que logras identificar?
Creo que ya lo había conversado previamente con ustedes, pero realmente anima mucho, anima mucho, genera mucha alegría y mucha emoción, este tipo de procesos que ocurren como el vivido en Chile. Seguramente que yo no conozco con precisión todo lo que ocurre en Chile, todas las complejidades del proceso que han vivido, pero sí se ve y se siente que hay una sociedad civil activa, una sociedad civil preocupada, cansada y que ha tomado de alguna forma en sus manos la tarea de hacer algo para cambiar las cosas, eso en Bolivia hemos vivido en varios momentos y son momentos realmente emocionantes en los que uno se da cuenta dónde está el poder y la fuerza real de nuestras sociedades que es en la gente, en la gente con conocimiento, consciente, comprometida y que hace algo, entonces es muy emocionante es realmente una muestra de que nuestras sociedades, nuestros países tienen esperanza, tienen futuro, porque sin esa riqueza, sin esa esperanza, sin ese compromiso, yo creo pues, que los que están en el poder podrían hacer realmente lo que quisieran y por supuesto que anima más que sea Chile, que usualmente no ha sido un país caracterizado por eso, por una sociedad civil activa, combativa, etc. Entonces anima que no seamos los únicos, que seamos realmente más países que estemos con esa fuerza social, pero al mismo tiempo, me hace reflexionar y me hace pensar y me pone un poco triste, no por Chile, sino me pone un poco triste por Bolivia, porque si bien nosotros, hemos vivido, hemos estado en un momento similar, estamos ahora en un momento diferente, estamos en un momento en el que desafortunadamente todo lo interesante, todo lo bonito, todos los cambios que soñamos, que empezamos, que algunos lograron empezar e implementar, finalmente muchos de ellos terminaron en lo mismo, terminaron en cambios o en poderes controlados por pequeños grupos con intereses, muchos de ellos con intereses económicos e intereses políticos y nuevamente estamos en Bolivia con una sociedad civil que no está consciente, que no necesariamente es combativa, comprometida con cambios, entonces es triste darnos cuenta de que nosotros estuvimos como ustedes, en este momento y ahora, de alguna forma esa oportunidad, bueno, se ha perdido, espero que no perdido para siempre, seguramente habrá otros momentos en los que se pueden hacer cambios, pero también es un momento importante para animarlos, para animarlos a que mantengan esa fuerza, mantengan ese nivel de movilización, que es la clave para realizar cualquier cambio, esa es la riqueza, más allá de un texto constitucional, más allá de un puesto, un cargo en el que cualquier compañero comprometido pueda llegar, la mayor conquista que han logrado, es la que ya tienen, esa fuerza social y es esa la que deben mantener.
¿A qué amenazas ustedes se han debido enfrentar cómo concretamente después de iniciado el proceso constituyente o después de haber establecido la Constitución?
En el caso boliviano una de las grandes discusiones, ya no solo discusiones, ahora también son reflexiones y análisis posteriores de ese momento constituyente es donde estuvo esa fuerza social, donde estuvo toda esa organización y fuerza social, hay algunos sectores que en algún momento criticaron y dijeron que mucho de eso se había concentrado y se había focalizado sobre la asamblea constituyente y no ahí sobre una pugna con sectores políticos y económicos de poder y esa tarea de enfrentar en los hechos y directamente al poder económico y fuerzas políticas de conservadores, muchos de ellos dicen que fue él gobierno el que se hizo cargo de eso; entonces, como que las fuerzas sociales abandonaron en alguna medida esa lucha política más directa, hay algunos analistas, algunos que inclusos fueron vicepresidentes de Bolivia, que más o menos hacen ese análisis, esa interpretación y ponen eso como un argumento para justificarse y justificar ciertos procesos de negociación y de concertación que finalmente hicieron con estos grupos de poder político y grupos de poder económico y la propia implementación de la asamblea constituyente.
Por supuesto que la gestión pública es una dimensión totalmente diferente, son otro tipo de desafíos y de realidades y de pragmatismos que a veces de tienen que enfrentar, pero también en ese proceso de implementarse, de concertar, de lograr realizar ciertas cosas, es que se justificaron las renuncias de ciertos principios y ciertas luchas, muchos de ellos constitucionalizados, finalmente muchos de estos, como les digo, límites, conquistas, principios plasmados en la Constitución política del Estado en la práctica no se implementaron y por el contrario, se implementaron cosas tan chiquititas, como les digo, un artículo transitorio, que favoreció a las cooperativas, de repente, fue el motivo para negociar con todo el sector minero entonces creo que ese es el mayor riesgo, la mayor amenaza, la mayor gran dificultad, en el que el proceso de implementar todos estos sueños, todos estos principios, todas estas cosas que se puedan lograr en la Constitución política del Estado, se renuncie a ellos, se vaya finalmente a dejarlos a un lado para poder viabilizar otras conquistas menores o conquistas viables, en fin. Ahí hay toda una mecánica de negociación política, que lamentablemente los partidos políticos son expertos en hacerlo, muchos dirigentes sociales, lamentablemente terminan aprendiendo esas artes y también van implementándolas, entonces creo yo que el mayor riesgo es eso, el mayor riesgo es de desconcentrarse, de perder la fuerza social, de perder ese ánimo, esa organización y de ir negociando por lograr determinadas conquistas o por lograr implementar ciertos avances; ir negociando cosas importantes y fundamentales.
¿Qué consejos y advertencias puedes darle a Chile en este proceso constituyente?
Bueno, lecciones importantes, una primera, es aprovechar esta fuerza social que se ha generado en Chile, además toda esta movilización, toda esto que ha ocurrido que yo no lo conozco en detalle, estoy seguro que es algo que no ha ocurrido de la noche a la mañana, es parte de un proceso largo y no de uno, de varios procesos sociales, entonces es importante respaldar y fortalecer eso que ha logrado gestar esta fuerza social, eso es lo que más hay que cuidar, lo que más hay que fortalecer, porque es esa la mayor y la principal riqueza, más allá de cualquier conquista, cualquier texto que se pueda colocar en la Constitución, es la fuerza social que se ha logrado durante tanto tiempo, es eso lo que hay que cuidar, lección uno.
Una segunda lección, es importante evitar este sectorialismo, en Bolivia sí hubo una articulación muy importante, muy rica, que logró hacer protagonistas a las organizaciones sociales, pero de alguna manera, las propuestas, la construcción de ideas en sí fue sectorializada, entonces las organizaciones sociales del agua hicieron tremenda presencia en la comisión de recursos hídricos y prácticamente lograron plantear todo lo que la comisión aprobó y la mayor parte de los artículos sobre recursos hídricos en la Constitución, pero los cooperativistas mineros hicieron algo similar, en la comisión de minería y las temáticas de minería; la empresa pública estatal de hidrocarburos hizo lo mismo en hidrocarburos, en gases etc. Entonces tienes una Constitución bien miscelánea, donde cualquier Gobierno se puede agarrar de cualquier cosa, entonces ahora tenemos una Constitución muy rica, muy interesante, pero el modelo extractivista tiene de donde agarrarse en esta Constitución, entonces el gobernante o el poder, sea Ejecutivo, Legislativo o Judicial, puede agarrarse de un artículo para poner mayor prioridad por sobre otro artículo, entonces este sectorialismo es una cosa que alguna forma ha afectado y es una lección importante también para Chile.
Lección también, no descuidarse en un solo momento; en el caso boliviano fue interesante que la movilización y el seguimiento social estuvo desde y ahí es donde empezaron algunos de los primeros problemas, desde la propia norma de convocatoria a la asamblea constituyente; entonces desde antes de que comience la constituyente hay que estar atentos y hay que estar presentes y no soltar ni un segundo, como les digo, a nombre de correcciones de estilo, se modificaron más de 100 artículos en la constitución boliviana y palabras pequeñas, pero que cambian completamente el significado de algunos artículos y permitieron la vigencia de importantes del sistema de partidos políticos en Bolivia; entonces no descuidarse ni un solo segundo es otra importante lección.
Y finalmente me permito comentar una última lección, la de, en los procesos de negociación que seguramente serán complejos, en el caso de Chile el tema del agua será mil veces más complejos que el caso ecuatoriano o boliviano, porque está íntimamente ligado a lo que es la minería, seguramente será un proceso muy complejo, el de discusión, debate y finalmente aprobación del tema constitucional. En los procesos de negociación nunca negociar los principios, nunca negociar los principales avances y planteamientos que se van construyendo desde la sociedad civil, creo que ya les he comentado un poco qué es lo que ha ocurrido en el proceso constituyente boliviano, sino especialmente de forma posterior a esta, pero es importante adquirirlo.