Son cinco meses de movilización ininterrumpida que han mantenido pobladores y pobladoras de Rucalhue, en Santa Bárbara, contra la instalación de una central hidroeléctrica en su territorio por parte de la empresa china International Water and Electric Corporation, que solicitó el desalojo de las y los manifestantes el pasado sábado.
Por Juan Contreras Jara
Ayer durante la tarde, las y los manifestantes dejaron provisoriamente el campamento que mantenían desde el 15 de febrero pasado, debido a la inminente amenaza de desalojo que había en su contra desde el sábado, el que se acompañó de un amplio contingente de Carabineros de FFEE apostados en el lugar.
Durante esta mañana las y los manifestantes provenientes del campamento se manifestaron a las afueras de la municipalidad de Santa Bárbara, desde donde denunciaron una vez más la inmovilidad de las autoridades municipales frente a la inminente intervención del rio Biobío.
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La empresa de capitales chinos International Water and Electric Corporation, busca instalar una central hidroeléctrica de pasada con embalse, proyectando una potencia total instalada de 90 MW y una generación media anual estimada de 465 GWh, pese a la enfática oposición de la comunidad en Rucalhue.
En definitiva los efectivos policiales no pudieron desalojar a las y los manifestantes porque no había nadie cuando quisieron concretar la acción, pero sí sentaron un nuevo precedente en la lucha de la comunidad rucalhuina, quienes no solo se habían visto amedrentados por supuestos representantes de la empresa, si no que ahora también por parte de Carabineros.
Fue el juez Josué Martínez Pinto el que autorizó, a través del Juzgado de Garantía de Sta. Bárbara el desalojo en un plazo no mayor a las 72 horas, acción que se concretó hoy en la mañana pero que no encontró a ningún manifestante.
Hay que agregar que debido al inminente desalojo, las y los pobladores mantuvieron cortado un kilómetro de vía, cercana al campamento y en la ruta Q-61R, a la altura cruce Los Junquillos, en Santa Bárbara.
El desalojo del campamento en Rucalhue se efectuó en medio de una creciente articulación de organizaciones socio ambientales del nuestra región, en contra del negocio extractivita, que tiene hoy a la empresa china International Water and Electric Corporation amenazando el nacimiento del caudal del rio Biobío.