El hecho tuvo lugar entre el jueves 3 y el domingo 6 de diciembre y se realizó para visibilizar la construcción del Embalse Zapallar en el río Diguillín, el cual destruirá el ecosistema de tres comunidades de la región de ñuble y además expropiará tierras a pobladores de la tercera edad. 

Por Kathia Cancino Rojas

"Necesitábamos instalar a nivel país la conversación sobre el embalse Zapallar, que en Santiago supieran que nosotros en comunas tan pequeñas como San Ignacio, El Carmen y Pinto tenemos un problema medioambiental". Así lo explicó César Figueroa, concejal de la comuna de San Ignacio y profesor de educación física quien en 2014 ya había realizado una hazaña parecida. 

La carta, firmada por más de 20 organizaciones sociales, se presenta en medio de la intransigencia de las autoridades de las comunas afectadas y las apresuradas gestiones para levantar el proyecto. Así lo manifestaron las y los pobladores en una carta abierta enviada a Revista Pudú, la cual explicita que el emplazamiento ocupará un total de 1.093,19 hectáreas y que un aproximado de 389 serán inundadas, afectando a las localidades de Pinto, San Ignacio y El Carmen. 

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Si bien el proyecto aún se encuentra en periodo de consulta ciudadana con plazo de cierre al 30 de diciembre del año en curso, estando aún en proceso de evaluación ambiental, desde el Ministerio de Obras Públicas (MOP) enviaron personal para revisar el área a ocupar y estacar los territorios que serán expropiados debido al paso de canales artificiales. Así lo dio a conocer Nayadeth Quintana, dirigenta social y gestora cultural de los territorios. 

Además, en conversaciones anteriores con RESUMEN, señaló que la construcción del embalse pone en riesgo diversos hitos arqueológicos, y que si bien las medidas de mitigación del Estado proponen sus traslados, estos serían desprovistos de su significado cultural y solo significarían "piedras en una plaza". 

En ese sentido, no solo existe una despreocupación desde los organismos gubernamentales de proteger el medioambiente, sino que el proyecto se ha visto envuelto en una serie de irregularidades. En primera instancia fue desestimado para luego, en un periodo de tan solo 10 meses, subsanar las observaciones ciudadanas. Asimismo, dicho proyecto fue ingresado por el Intendente de la región de ñuble y no por el MOP, entidad a cargo del plan constructor. 

Sin embargo, el Organismo de la Administración del Estado con Competencia Ambiental (OAECA) ya presentó observaciones en la página dispuesta para ello por el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), las cuales poseen un número mayor que las presentadas durante el proyecto anteriormente desestimado. 

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Por el momento, los y las pobladoras de las localidades afectadas se encuentran a la espera del término de la consulta ciudadana, para que el SEA pueda estimar cuáles serán los pasos a seguir y si la construcción del embalse Zapallar es efectiva o no. Respecto a la carta, desde el Ejecutivo cuentan con un plazo de 20 a 30 días para dar respuesta a la solicitud de los afectados/as de deponer el proyecto.

Puedes leer la carta completa a continuación: