Pese a que se ha negado en reiteradas oportunidades a recibir a las propias familias de los manifestantes imputados en el Caso UdeC, Carlos Saavedra se ha dado el tiempo para deslegitimar el contexto de Estallido Social en el que cayeron detenidos los 12 jóvenes y que los tiene bajo una querella emanada de la casa de estudios.
Por Juan Contreras Jara
Son meses los que llevan las familias de los 12 manifestantes investigados en el Caso UdeC tratando de concertar una reunión con el directorio de la universidad penquista, sin éxito aún. Pese a que el rector, Carlos Saavedra, se comprometió a establecer una mesa de diálogo con las familias de los jóvenes afectados, ésta todavía no se concreta.
Sumado a aquello, el rector sacó del contexto del Estallido Social las protestas desarrolladas en el campus penquista durante enero y febrero de 2020, pese a que las protestas continuaron incluso hasta marzo del 2020, siendo detenidas recién con el inicio de la pandemia.
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Sobre esta nueva arremetida mediática del mandamás de la Universidad de Concepción contra los manifestantes, Elena Orellana, vocera de las familias de los afectados con la querella, señaló que estaría ensuciando sus exigencias e indicó que: «él sí se da el tiempo de hablar con medios amarillistas y nosotros seguimos estamos sentados esperando el supuesto llamado».
La vocera hace alusión a las declaraciones vertidas en Biobiochile por Saavedra, donde intentó descontextualizar las manifestaciones ocurridas durante febrero y marzo de 2020 del Estallido Social.
En esta línea, Orellana comentó que: «de partida vemos que hay una desinformación absoluta, porque a los chicos se le están imputando cargos ocurridos entre febrero y marzo y obviamente, eso cae dentro de las fechas del Estallido Social. No sabemos si él esta siendo mal informado, sólo está viendo este tema basado en las elecciones y su reelección, que fue para lo que utilizó esta entrevista».
Recordemos que el pasado miércoles, Carlos Saavedra fue encarado por la vocera de las familias de los 12 querellados en el Caso UdeC, momento en el que el rector aseguró que llamaría a Orellana para establecer una mesa de diálogo, no obstante, no cumplió su palabra, dándose el tiempo únicamente para comentar sobre la continuidad de la querella.
Desde las familias de los manifestantes expresaron sobre Saavedra que: «lamentablemente, nos damos cuenta de que en gente como ésta no se puede confiar».