La falta de probidad por parte del Mineduc con las cotizaciones impagas de las y los profesores de Tiltil suma y sigue. Luego de que no fiscalizarán los montos que enviaron hasta el municipio para palear la multimillonaria deuda que mantiene con el profesorado y que finalmente se gastaron en otras áreas, en la actualidad no cumplió con el pago de más de mil millones de pesos destinadas a cancelar un tercio de este déficit.

Por Juan Contreras Jara 

Tanto el Mineduc como el municipio de Tiltil, cumplieron ya cinco años arrastrando una deuda de más de 4 mil millones de pesos con las cotizaciones de las y los profesores de la comuna. Si bien existieron compromisos entre el ministerio y el profesorado, que amarraban el pago de un tercio de la deuda total para el pasado 15 de diciembre, la medida hasta la fecha no se ha concretado.

Hay que destacar que los y las profesoras, en un acto de buena fe, aceptaron bajarse del paro que mantuvieron durante la segunda mitad del año pasado debido al compromiso asumido por el subsecretario de Educación, Jorge Poblete, pero hasta la fecha no ha sido cancelada ninguna cuota de las cotizaciones adeudadas.

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La excusa que habría dado el Mineduc para no cumplir con la fecha acordada con las y los docentes, habría que el convenio acordado habría estado supuestamente mal redactado, informó Alejandra Arévalo, dirigenta de las y los docentes de Tiltil.

La excusa fue informada por el Mineduc la última semana de diciembre, pero hasta la fecha no ha entregado nuevas fechas para el pago de este tercio de la deuda total. Sobre el supuesto error del Mineduc, la dirigenta indicó que, «lo primero que tienen que hacer es revisar los convenios que van a firmar, antes de ser firmados, sobre todo cuando se nos plantea en reunión que la deuda va a ser pagada de esta forma. Este error no tenía que pasar, porque llevamos mucho tiempo esperando que se nos pague. Necesitamos que se subsane ahora».

La falta de probidad del Mineduc

Cabe destacar que el compromiso asumido entre el Mineduc y el alcalde de Tiltil, Luis Valenzuela, implicaba que el ministerio cancelaría la tercera parte del total de la deuda con las cotizaciones de los docentes -unos mil 200 millones de pesos- y que sería el último salvavidas que brindaría al municipio tiltilense, pero el pago no se concretó.

Las repercusiones de esta situación tendrían que ver con que luego de esta cuota, la municipalidad debería haber iniciado la búsqueda de fondos para cancelar los más de 3 mil millones de pesos restantes, pero ni siquiera se ha pagado el primer monto comprometido, por lo que las y los profesores siguen en total incertidumbre.

«Durante el año pasado, cuando tuvimos una reunión con personas de la corporación de educación y el alcalde, nos dijeron que estaban esperando que saliera elegido el nuevo gobierno para ver si las cosas se ponían a su favor, porque en este momento no le alcanzaba la plata para todo lo que había que cubrir para pagarnos», comentó Alejandra Arévalos. 

Recordemos que otra de las opciones barajadas por el alcalde de Tiltil, Luis Valenzuela, para pagar los dos tercios de deudas con los y las docentes, podría ser poner en prenda algún establecimiento educacional y postular a un crédito, situación rechazada tajantemente por el profesorado. 

Sobre la eventual inoperancia del alcalde Luis Valenzuela y la corporación educacional del municipio de Tiltil, la dirigenta expresó que, «creemos que no está la voluntad. En el último consejo se nos dijo que se nos entregaba toda la información, pero esta no ha llegado, por ejemplo, no se nos ha rendido la segunda cuota del Faep que llegó a la corporación, que era íntegramente para pagar nuestras imposiciones y no sabemos a quienes se le pagó. Nosotros sacamos nuestros estados de cuenta y no se nos ha pagado nada».

La única certeza que le entregaron al profesorado desde el municipio es que para el 15 de enero deberían estar por lo menos los pagos de cotizaciones correspondientes a las y los docentes que están esperando su incentivo al retiro. «Esperamos que no pase lo que ocurrió hace un tiempo, porque la plata llegó y se la gastaron».