Esta mañana el Tribunal de Garantía de Cañete determinó cambiar la medida cautelar de prisión preventiva que pesaba contra el joven mapuche de 19 años, Tomas Antihuen, a arresto domiciliario nocturno.

Por Juan Contreras Jara

Luego de permanecer recluido seis meses, primero en El Manzano en Concepción y luego en la cárcel de Lebu, Antihuen retornará en las próximas horas hasta el Lov Lafkenche Lleu Lleu, perteneciente a la franja costera de la provincia de Arauco.

El joven mapuche fue detenido con 18 años de edad el 15 de julio de 2020, después de una violenta arremetida policial que reprimió -al iniciarse- una marcha mapuche exigiendo la aplicación del Convenio 169 de la OIT a las situaciones judiciales de los presos mapuche en huelga de hambre.

En aquella oportunidad se registraron violentos ataques policiales contra las y los manifestantes que se disponían a marchar, agresiones de connotación sexual contra dos comuneras y la destrucción de uno de los portones del museo Mapuche de Cañete, además de daños y amago de incendio en su techumbre tras el descontrolado uso de bombas lacrimógenas por parte de Carabineros.

Miguel Leviqueo, vocero de la red de apoyo de Tomas expresó que "la familia está muy contenta, feliz de tenerlo nuevamente cerca y poder compartir con él. Esta fue una situación bastante compleja, porque es un joven. Tomas cae detenido en medio de un proceso de huelga y manifestaciones, pero de igual forma él tiene claridad absoluta de que vivimos un proceso de liberación dentro del territorio".

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Por lo pronto, Antihuen debería dejar la cárcel de Lebu en las próximas horas luego de la resolución del Tribunal. Por su parte, su comunidad y familia expresaron que se preparan desde ya para conjeturar los pasos a seguir en la liberación del joven mapuche y de los demás presos políticos de Lebu.

El vocero de Antihuen expresó que espera que el cambio de medida cautelar sirva como precedente en la situación judicial de los demás presos políticos mapuche en Lebu, aunque fue cauto al comentar que "no nos podemos aventurar, pero a priori nos deja la tranquilidad de que se están tomando los alegatos de la defensa. En muchos de nuestros presos la prisión preventiva no tiene relación con los hechos que se le imputan, así que nos deja en cierta forma tranquilo, pero también sabemos que el Estado juega con estas situaciones".