Un remezón se produjo esta jornada en el Gobierno Regional del Biobío luego de que el gobernador regional, Rodrigo Díaz Wörner, aceptara las renuncias del administrador regional, del jefe de gabinete del gobernador y del jefe de la división de Desarrollo Social y Humano del Gobierno Regional del Biobío.

La salida de los cuestionados funcionarios fue confirmada a través de un comunicado de prensa emanado desde el GORE Biobío y se da en el contexto de los duros cuestionamientos al Gobierno Regional del Biobío por las transferencias directas a fundaciones, entre ellas, la mediática causa en la que se ha cuestionado a la excandidata a alcaldesa y diputada, Camila Polizzi, que ha sido criticada por presuntamente haber utilizado dinero de esas transferencias para comprar, entre otras cosas, ropa íntima.

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No obstante, no es el único caso que se ha cuestionado. El Ministerio Público se encuentra en la actualidad investigando estas transferencias y hay querellas interpuestas por el propio gobernador y también por el diputado Leonidas Romero. A ello se agrega las presentaciones realizadas a Contraloría, a la Fiscalía y al CDE por los consejeros regionales Camila Arriagada, Javier Sandoval, Piero Blas y Gabriel Torres.

Esta jornada Resumen reveló la nota «Generoso banquete a cargo del erario fiscal: fundación pagó almuerzo de $238 mil con fondos del Gobierno Regional del Biobío». La organización cuestionada es la Fundación Educación Financiera dos de los representantes de la fundación coinciden también en el directorio de Impulsa, otra fundación que recibe dineros del GORE Biobío. Además, ambos también trabajaron en INFOCAP, institución en la que coincidieron con el ahora renunciado jefe de División de Desarrollo Social y Humano del Gore Biobío, Simón Acuña.

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