Este viernes se dió a conocer la decisión del Directorio de la Corporación Nacional del Cobre de Chile (Codelco) de iniciar el cierre de las operaciones de la Fundición de División Ventanas, ubicada en la azotada comuna de Puchuncaví, donde se desarrolla la fundición y refinería de cobre proveniente de la extracción de medianas empresas mineras como también desde la gran minería, como lo son sus divisiones Andina y Teniente, lo cual ocurre luego de nuevos episodios de intoxicación de habitantes del territorio.
Saludamos la decisión de Codelco y del Gobierno en iniciar el cierre de la Fundición, lo que se da luego de una extensa lucha de las comunidades frente al sufrimiento y los efectos que ha arrastrado el polo industrial instalado por décadas en el territorio Quintero-Puchuncaví, donde también funcionan más de una decena de empresas, que han conllevado afectaciones a la salud de la población, deterioro del medio ambiente y una precarización generalizada de la vida.
Este es un punto de inicio para avanzar en el término del territorio en sacrificio, siendo una señal importante por parte de la empresa Estatal ante la comunidad local y el país, donde también se ha manifestado la permanencia de puestos de empleo de las y los trabajadores actualmente en ejercicio, pero que también requiere de la participación de quienes han entregado su fuerza de trabajo y no se les ha clarificado cómo se realizará este procedimiento, plan denominado por Codelco de Transición Justa. Así, el proceso arrastra también legítimas preocupaciones de distintos sectores que forman parte de las comunidades, como lo son medidas de relocalización o cierre de empresas privadas que aportan a la crítica situación sanitaria y ambiental que se vive donde, por ejemplo, División Ventanas aportaba con más del 60% de emisiones totales de dióxido de azufre.
En este sentido, la fiscalización anunciada por el Gobierno sobre el resto de empresas no es una medida suficiente, situación similar frente a la permanencia de la Refinería de la División Ventanas que continuaría en funcionamiento. Ante esto, manifestamos nuestra preocupación respecto a la forma en cómo se despliega la llamada "Transición Justa", siendo necesario avanzar hacia una Transición con Justicia, lo cual debe incluir remediación y reparación social, sanitaria como también ambiental en el territorio afectado.
De esta forma, esta decisión no puede ser utilizada para postergar la revisión y ejecución de medidas sobre el resto de Divisiones de Codelco, las mismas que acumulan serios impactos en los territorios, al Agua y los Glaciares; como tampoco debe ser considerada suficiente para permitir el funcionamiento de empresas privadas contaminantes en el territorio de Quintero-Puchuncaví.
En la misma línea, no podemos dejar de manifestar nuestra preocupación por los anuncios dados por el presidente Gabriel Boric, que junto a las buenas noticias del cierre de la Fundición Ventanas y bajo la excusa de aportar a la lucha contra la crisis climática, da orientaciones hacia la mantención y profundización de la Gran Minería mediante la explotación de cobre para la electromovilidad de los países del Norte Global, sin pronunciarse sobre el resto de territorios en sacrificio que permanecen en Chile.
Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales – OLCA
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Fotografía principal: Fundación Terram