[resumen.cl] El 15 de febrero un grupo de jóvenes instaló un campamento en el acceso al lugar donde se pretende instalar una central hidroeléctrica en la confluencia de ríos en la provincia del Biobío. Pese a los amedrentamientos y amenazas, las personas ya han cumplido dos meses de movilización en el lugar.

Habitantes de Rucalhue se encuentran desde hace meses visibilizando el conflicto creado a partir de un proyecto que busca instalarse en el territorio, el cual consta de una central hidroeléctrica de capitales chinos liderado por la empresa International Water and Electric Corporation, controladora de Rucalhue Energía.

Pese a contar con su Resolución de Calificación Ambiental aprobada, la construcción del proyecto no se ha podido materializar debido, principalmente, a la resistencia de las comunidades de la localidad, quienes el pasado 15 de febrero levantaron un campamento donde se pretenden instalar las faenas.

En contacto con RESUMEN, desde el Campamento Rucalhue realizan un balance positivo de la movilización, dando a conocer que existe un alto nivel de cohesión en el campamento como también de vinculación con organizaciones de la cuenca del Biobío y de todo Chile.

En este sentido, señalan que «hemos podido posicionar nuestro movimiento mucho más allá de nuestro territorio y esta articulación multidisciplinaria nos ha permitido recopilar información muy importante con respecto muchas deficiencias del proyecto sobretodo relacionadas con la omisión de información ambiental crucial por parte de la empresa y los organismos estatales».

Fotografía: Agrupación Juvenil Semillas del Lirquen Rucalhue

Respecto al despliegue que ha tenido la empresa y órganos estatales, indican que ha imperado una lógica de intimidación amenazando con acciones legales e intentando establecer redes con habitantes del territorio para crear una suerte de desprestigio.

Asimismo, señalan que los organismos públicos «brillan por su ausencia» pese a las denuncias que han visibilizado; una de estas, relacionada con hechos ocurridos esta semana donde fueron amedrentados por quienes se presentaron como «dueños del terreno».

Sin embargo, ante este escenario recalcan que existe un apoyo importante de la propia población a la movilización, lo cual le ha dado legitimidad al proceso; la misma población que  acusó meses atrás al diputado y recientemente proclamado como candidato presidencial, Pablo Vidal, de haber sido lobista ante las comunidades para la instalación de nueva hidroeléctrica.

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Consultadas por avances organizativos, las personas del campamento señalan que han recibido apoyo técnico de diversas organizaciones, «generando información que nos va a servir para las acciones que podamos tomar, sin embargo mucha de esta información debe ser canalizada de manera legal».

En términos de perspectiva, enfatizan en que «para nosotros la única solución es que la empresa se vaya y desista del proyecto. Nuestro territorio es una zona de sacrificio que no resiste más intervenciones».

Así, caracterizan a Rucalhue, Santa Bárbara y territorios de alrededores como «sometidos ante el abuso de empresas que nos han llenado de monocultivos forestales y tantas otras cosas», donde la «calidad de vida se ha visto afectada en muchos sentidos y encontramos que debemos hacer valer el derecho de vivir en un lugar libre de contaminación».

A modo de cierre, señalan que «nos sentimos con la responsabilidad de hacer algo por recuperar y conservar nuestro pueblo, nuestra historia, nuestro hogar».

Fotografía principal: Agrupación Juvenil Semillas del Lirquén Rucalhue