Nuevamente, las prácticas de Forestal Arauco al interior de sus predios, muchas veces colindantes con comunidades, están siendo criticadas tanto por su impacto socioambiental como por la falta de seguridad para su implementación. Es desde Tomé que se está cuestionando a la multinacional, que mantiene embalses de agua donde han terminado cayendo distintos animales. La situación ya motivó emplazamientos al SAG y CONAF y se teme por el riesgo para las y los vecinos como también para la fauna nativa presente en el lugar.

Por JC Contreras Jara

A las enormes zanjas efectuadas por Forestal Arauco, ahora parte de la comunidad en Tomé, en la región del Biobío, dio cuenta de una riesgosa situación: la permanencia de distintos embalses utilizados durante los incendios forestales, donde habrían caído, según la denuncia ciudadana, al menos seis perros comunitarios en las últimas semanas.

Precaución, imagen fuerte:

La situación no solo alarmó a la comunidad por la lamentable situación de estos animales, a los que se le suma un ratón de cola larga, parte de la fauna nativa que aún resiste entre las miles de hectáreas de monocultivo forestal. Lo anterior da cuenta de un riesgo para las pocas especies de esta índole que quedan en la zona y por supuesto, para las personas que habitan en las cercanías del embalse, que según el concejal de Tomé, Felipe Romero, están a menos de un kilómetro.

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En una publicación de RRSS, perteneciente al grupo animalista «Orgullo Animal Tomé», se pueden observar los cuerpos sin vida de los canes, apuntando a que cabe la posibilidad de que en el fondo de dichos embalses se encuentren más animales muertos. Destacan además la pésima situación de seguridad de los depósitos de agua, que no cuentan, según Romero, con señaléticas de advertencia o con medidas de seguridad que impidan realmente el paso de animales y personas, ya que según el registro el cercado consistiría en la clásica malla naranja utilizada en las construcciones.

En conversación con Resumen, el concejal tomecino Felipe Romero, expresó que «no se maneja un estado mínimo en materia de seguridad con respecto a estos embalses».

Resumen tomó contacto con Forestal Arauco, desde donde se limitaron a indicar que, «el lugar se encuentra alejado de zonas pobladas y cuenta con un cerco en todo su perímetro».

Un riesgo para la comunidad y la fauna nativa existente

Durante lo que va del año, parte de la comunidad tomecina ha advertido al menos tres situaciones de mala convivencia o directa afectación desde Forestal Arauco; desvío de caminos, construcción de zanjas al rededor de los predios y ahora, la presencia de embalses sin las debidas medidas de seguridad.

En esta última situación, pone hincapié Romero, corre riesgo la comunidad apuntando a que los embalses están, «a menos de dos kilómetros de una casa, yo diría menos. Es una zona de tránsito es el lugar. Al otro lado nosotros tenemos el mar, y si tú cruzas por esos predios llega al otro lado al río. Recordemos que estos predios históricamente son predios que siempre han usado la comunidad».

En cuanto al riesgo para la fauna nativa, el concejal enfatizó en que «existe relicto de bosques nativos, todavía queda fauna silvestre». 

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Romero apuntó al riesgo que quedó al descubierto con el hallazgo de estos perros comunitarios, para la fauna silvestre que queda en el lugar, «por ejemplo, el monito del monte que habita en nuestros sectores, porque concordemos que las plantaciones forestales están insertas o fueron insertas dentro de los predios que antiguamente eran bosques nativos. Lo que existe ahí también son relictos de bosques nativos».

El edil agregó que, «este tipo de embalses no es un afluente natural, es artificial, por lo que la fauna nativa no estaría acostumbrada. Entonces, ya ahí partimos con una problemática, en el cuestionamiento de por qué un predio forestal que interviene también en sectores aledaños donde hay tránsito de fauna silvestre, no contempla medidas de seguridad mínimas, inclusive para la fauna que existe en el lugar. Lo mínimo que debería tener,es el cierre por la parte baja hasta lo alto no permita el traspaso de animales de un tamaño muy pequeño, hasta un animal de gran tamaño, que pueda correr una cerca, como una vaca».

La situación ya motivó dos oficios por parte del concejal tomecino al SAG y a CONAF, para que den cuenta dela normativa en cuanto a la tenencia de grandes embalses y las medidas de seguridad con el entorno y su comunidad, desde donde señalan no ver a un vecino en Forestal Arauco, sino un foco de problemas.